El futuro de la lagartija pitiusa en manos de todos

El reto de conservación de esta especie es mayúsculo pero la gravedad de la situación no debe desalentarnos en nuestro empeño, sino animarnos a redoblar esfuerzos

Ejemplar fotografiado hace más de 10 años en Pou des Lleó.Actualmente está poblaciónparece haberse extinguido completamente debidoa las serpientes.   jordi serapio

Ejemplar fotografiado hace más de 10 años en Pou des Lleó.Actualmente está poblaciónparece haberse extinguido completamente debidoa las serpientes. jordi serapio / INMA SARANOVA

Inma Saranova

Seguramente la preservación de la lagartija pitiusa sea uno de los mayores y más urgentes desafíos ambientales a los que nos enfrentamos actualmente en Ibiza y Formentera ante la delicada situación en la que se encuentra esta emblemática especie dos décadas después de tener conocimiento de la primera serpiente invasora en la isla de Ibiza.

Santuarios de lagartijas instaladosen el hotel AluaSoul, en es Canar, unode más de 40 complejos turísticosinvolucrados en la iniciativa. IP

Santuarios de lagartijas instalados en el hotel AluaSoul, en es Canar, uno de más de 40 complejos turísticos involucrados en la iniciativa. IP / INMA SARANOVA

La proliferación de culebras supone un desafiante problema y por este motivo, este año, la fundación ambiental IbizaPreservation se ha volcado en la mejora de la situación lanzado su proyecto ‘Protegim ses sargantanes’, el cual busca apoyar las acciones iniciadas por otros actores en la preservación de las lagartijas mediante un enfoque multidisciplinar basado en la mejora de la resiliencia de las poblaciones de lagartijas por un lado, y en la contención simultánea de la invasión de serpientes, por otro.

La zona de Cap de Barbaria, comoel resto de la isla de Formentera,alberga en la actualidad poblacionesde lagartijas en buen estado deconservación.  jordi serapio

La zona de Cap de Barbaria, como el resto de la isla de Formentera, alberga en la actualidad poblaciones de lagartijas en buen estado de conservación. jordi serapio / INMA SARANOVA

Así, hasta la fecha, gracias a una ayuda de Caixabank y Fundació Sa Nostra, IbizaPreservation ha fabricado en colaboración con el GEN-GOB un centenar de refugios artificiales para lagartijas cuya instalación se ha hecho mayoritariamente en zonas ajardinadas de hoteles. El principal objetivo de esta acción es mejorar las condiciones ecológicas de la especie en zonas urbanas y residenciales, ya que este hábitat puede ser decisivo para su conservación en el contexto actual de extinción de lagartijas en las zonas rurales. Se trata de una acción basada en las evidencias científicas realizadas el año pasado por investigadores del Instituto CREAF (vinculado a la Universitat Autònoma de Barcelona), que sugiere que las zonas urbanas y residenciales actúan como reservas para la especie. Además, la creación e instalación de estos santuarios también busca obtener datos sobre la presencia de lagartijas en zonas urbanas, así como la implicación del sector turístico en este reto de conservación. En este sentido, la respuesta por parte del sector ha sido muy positiva, con más de 40 complejos turísticos involucrados.

Por otro lado, IbizaPreservation también ha producido 100 trampas inteligentes, una acción que se centra en la producción de un nuevo prototipo de trampas selectivas que sean útiles para utilizar en zonas donde la presencia de lagartijas es todavía elevada. Parte de esta producción se entregará al Consorcio para la Recuperación de la Fauna de les Illes Balears (COFIB) para apoyar su campaña de trampeo, mientras que el resto se han instalado en los mismos hoteles seleccionados como santuarios.

Asimismo, a finales de mayo, IbizaPreservation arrancó su propio proyecto piloto, centrado en una experiencia intensiva de trampeo de serpientes en las zonas naturales protegidas del parque Natural de Ses Salines y en Ses Feixes de Talamanca que consiste en gestionar un número elevado de trampas en un área reducida. Con esta acción, la fundación busca incrementar los esfuerzos de erradicación realizados por el COFIB en estas zonas. Ambos lugares son importantes focos de biodiversidad, pero difieren sustancialmente en la situación actual de invasión de serpientes.

Mientras que ses Feixes alberga una enorme densidad de culebras de herradura y aún hay una pequeña población de lagartijas que conservar, en ses Salines, por el contrario, la presencia actual de serpientes parece ser aún baja mientras que la densidad de lagartijas se mantiene en cifras normales por el momento. Actualmente, se están gestionando un total de 50 trampas entre ambas áreas, (20 en ses Feixes y 30 en ses Salines) y, a pesar de ser una cifra reducida, ya se han registrado importantes resultados. Hasta el 31 de agosto, el total de capturas ha sido de 75 (69 serpientes en Ses Feixes, seis en Ses Salines), un número que previsiblemente continuará aumentando durante los meses de septiembre y octubre.

Estos primeros resultados preliminares en ses Feixes verifican una enorme densidad de serpientes en la zona, por lo que allí, evitar la expansión a otras zonas y mantener baja la presión de los depredadores sobre las lagartijas y otra fauna vulnerable son los principales objetivos. En lo referente a ses Salines, aunque allí sólo se han retirado unos pocos ejemplares, los resultados obtenidos son especialmente beneficiosos para frenar el establecimiento local de poblaciones de serpientes en esta zona que ha sido recientemente invadida. Podríamos decir, que una sola serpiente capturada en ses Salines, vale por diez capturadas en ses Feixes a nivel de protección de las poblaciones de lagartijas del parque natural ya que los datos indican en allí aún es posible contener la invasión de serpientes, y por tanto, proteger las poblaciones de lagartijas aún existentes.

Pero todos estos esfuerzos por parte de la fundación así como los que llevan años realizado otras entidades de la isla como el propio COFIB, ‘Sargantanes o Serps’ —formado por Amics de la Terra y GEN-GOB— o el Institut d’Estudis Eivissencs, serán en balde si no se activan de forma efectiva los protocolos de bioseguridad necesarios para evitar que las serpientes invasoras y otras especies potencialmente peligrosas sigan llegando a las islas, algo que, por el momento, no se está cumpliendo, así como para evitar impactos a otros grupos faunísticos en este espacio natural de altísimo valor. Pese a que el Consell de Govern aprobó el pasado mes de enero el Decreto Ley de medidas extraordinarias y urgentes para la protección de la lagartija pitiusa (Podarcis pityusensis), el cual establecía medidas de bioseguridad para frenar la entrada de ofidios en las Illes Balears y preservar las especies endémicas de lagartijas de Baleares, lo cierto es que, ocho meses después, aún no se había habilitado ninguna zona de cuarentenas para evitar la entrada a la isla de Ibiza especies invasoras dentro de los troncos de árboles susceptibles de albergar serpientes o huevos de serpientes en su interior.

Las especies de culebras invasoras están depredando a las especies nativas como las lagartijas porque no tienen depredadores naturales en nuestras islas, y esto puede tener un efecto cascada en el conjunto del ecosistema. De hecho, estas serpientes son una amenaza también para los pequeños roedores de la isla y para diversas especies de aves y sus crías. Esto significa que la introducción de esta nueva especie puede alterar la estructura del ecosistema pitiuso, modificando los patrones biológicos y la dinámica general del entorno.

La situación de Ibiza demuestra que, una vez que las especies de culebras invasoras se establecen y se propagan en un territorio insular como el nuestro, es realmente difícil y costoso controlar su población y mitigar los impactos. Por eso, la prevención inicial es mucho más eficaz y económica que los esfuerzos posteriores de control y es por este motivo que desde IbizaPreservation quieren empezar a trabajar en materia de bioseguridad en Formentera donde la situación aún no es tan grave como en Ibiza pero, sin duda, podría llegar a serlo.

La principal especie naturalizada en la Pitiusa menor hoy en día es la culebra de escalera. Esta es menos agresiva y no supone una amenaza tan grande a la población endémica de lagartijas. Además, según los datos actuales, parece estar relegada a la zona de La Mola. Sin embargo, las consecuencias de una posible naturalización de la culebra de herradura para la biodiversidad de Formentera, y especialmente para sus poblaciones de lagartijas serían desastrosas (como lo es en Ibiza en la actualidad). Por este motivo es necesario un protocolo de bioseguridad para el puerto de la Pitiusa menor basado en detección precoz y en sistemas de respuesta rápida para minimizar el riesgo de introducción accidental de culebras de este tipo procedentes de Ibiza. Así, IbizaPreservation ya se ha puesto a disposición del Consell de Formentera para poder ayudar a impulsar dicho protocolo.

Eso no implica, en ningún caso, perder el foco del problema urgente que tenemos en Ibiza. Por eso, parece necesario un incremento por parte de todos los agentes implicados de los esfuerzos de erradicación de serpientes y una mejora en el trampeo, un trabajo en el que IbizaPreservation se centrará también aun sabiendo que no hay garantías de éxito. Un escenario en el que la erradicación total de las serpientes invasoras parece poco realista ya que las experiencias externas invitan al pesimismo, según se planteó en el Congreso de Herpetología realizado en abril en Santa Eulària. Según los expertos hasta la fecha, en ningún sitio del mundo ha habido erradicaciones exitosas de serpientes en áreas mayores de una hectárea.

A pesar de ello, no podemos rendirnos en nuestro empeño de conservar nuestra especie más emblemática por lo que desde IbizaPreservation se insiste en que se puede y se debe hacer un esfuerzo multidisciplinar para apoyar proyectos públicos y cualquier otra iniciativa privada orientada a este fin.

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