No hay fin de año en Ibiza sin Pujada a la Catedral

El atleta Ismael Parrilla con varios dorsales, ayer durante la recogida en Vara de Rey. | TONI ESCOBAR

El atleta Ismael Parrilla con varios dorsales, ayer durante la recogida en Vara de Rey. | TONI ESCOBAR / R.J.PALOMO. EIVISSA

R.J.PALOMO.

La mítica Pujada a la Catedral cumple este domingo su cuadragésimo primera edición con la tradicional ascensión a Dalt Vila para concluir el año por las calles Patrimonio de la Humanidad de la capital ibicenca. Con salida a las 16,30 horas, los más de 800 inscritos en la carrera tendrán la ocasión de despedir el año quemando los turrones sobre una distancia en subida de 2.330 metros.

En esta clásica del atletismo insular, Gran Premio Eduardo Firavanti, la mayoría de participantes acuden disfrazados y con el objetivo de disfrutar corriendo para despedir el año. La prueba saldrá desde el monumento de los Corsarios con dirección a la plaza de Sa Riba, giro y vuelta por la misma calle; rodeo a es Martell y continuación por la calle Lluís Tur y Palau hacia el Mercat Vell. Desde allí se sube por el Portal de ses Taules, giro hacia la plaza dels Desamparats y continuación por las calles de sa Carrossa, General Balanzat, Pere Tur, Joan Roman, Major y llegada en sa plaça de sa Catedral.