Sube un 1,3% la generación de residuos en 2023 en Ibiza tras el incremento del año anterior del 13%

La subida de las cifras de gestión del vertedero de Ca na Putxa se contiene después del fuerte incremento de 2022 por el efecto de la pandemia del covid

La planta de triaje de Ca na Putxa.

La planta de triaje de Ca na Putxa. / VICENT MARÍ

Eugenio Rodríguez Martos

Eugenio Rodríguez Martos

La generación de todo tipo de residuos, aquellos que se gestionan en el vertedero de Ca na Putxa, alcanzó el año pasado algo más de 150.000 toneladas, con una subida con respecto a 2022 del 1,3%. Esto supone una contención en el incremento en la gestión de los residuos de Ibiza tras el aumento global registrado en 2022 del 12,8%.

El año pasado se redujo un 1% el volumen de residuos sólidos urbanos, los que se lanzan al contenedor gris, cuando en 2022 se incrementó en un 7,3%. Además, la contención en el crecimiento de las cifras también afecta a la recogida selectiva. Aunque en cifras globales, la suma de las toneladas de papel/cartón, vidrio, envases y materia orgánica recuperada el año pasado (39.761) supera por poco la de 2022 (38.795), el porcentaje en papel y vidrio bajan (1,3 y casi 1%, respectivamente) y sólo aumenta en el caso de los envases (casi 4%) y la materia orgánica (9,7%).

En cambio, en el ejercicio de 2022, la recogida de papel aumentó un 17,6% en comparación con 2021, la de vidrio un 29,3% y la de la fracción de envases casi un 17%. Mucho mayor fue el incremento de la recogida de materia orgánica que se disparó un 67,2%.

El efecto de la pandemia del covid

Un portavoz del Consell explica que esta diferencia estriba en el hecho de que en 2022, los datos se comparaban con los de 2021, aún en plena pandemia del covid, cuando la reducción de la actividad económica repercutía en una caída de los datos de gestión de residuos. Así, tras la fuerte subida de 2022 por la recuperación de la actividad económica plena, en 2023 «se estabilizaron» los datos, según el portavoz de la institución.

El incremento de la recogida de materia orgánica se considera lógico, al ser relativamente reciente su implantación, lo cual, en principio, debe repercutir en el descenso del volumen de basura que se lanza al contenedor gris. En el caso del resto de fracciones de recogida selectiva, sólo aumenta el de envases, con casi un 4%. El Consell justifica este incremento en que «se están haciendo muchas campañas y la gente va tomando conciencia».

En todo caso, los datos de recogida selectiva aún quedan lejos de los parámetros que marca la normativa. Antes de 2030, el 10% como máximo de los residuos que se generen en la isla podrán eliminarse mediante su depósito en el vertedero. Hay que tener en cuenta que a Ca na Putxa le queda una vida útil de entre seis y siete años, aproximadamente, y que el Consell ya ha iniciado el proceso para decidir el futuro de la gestión de los residuos de la isla. Este pasa por la construcción de una incineradora en la isla o por trasladar los residuos de las Pitiusas a la planta de Son Reus, en Mallorca.

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