Santa Eulària justifica que en Jesús hay agua suficiente para el hospital de Tur Viñas

La Entidad Municipal Santa Eulària des Riu XXI SA (Emser XXI), sociedad dependiente del Ayuntamiento, emitió un informe en enero de este año en el que se justifica que «actualmente es viable el suministro de agua» al hospital privado que proyecta el empresario farmacéutico Juan Tur Viñas en Jesús.

La sociedad pública de Santa Eulària concluye que, con el consumo de agua previsto por el complejo sanitario, de 90 metros cúbicos diarios (32.850 metros cúbicos anuales), queda un margen de 27.223 metros cúbicos al año (9,8%) hasta alcanzar el límite de extracciones subterráneas autorizadas por la dirección general de Recursos Hídricos del Govern balear. Este máximo se sitúa en 278.000 metros cúbicos al año.

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La sociedad dependiente del Ayuntamiento indica en su informe que se han reducido los caudales extraídos de las captaciones de pozo situadas en la zona de abastecimiento de Jesús por debajo del límite apuntado. En concreto, el año pasado se captó un volumen de 217.927 metros cúbicos de agua, por lo que si le suma la necesidad hídrica que, según el proyecto del promotor, precisaría el nuevo complejo sanitario, aún quedaría un margen más de consumo para alcanzar el tope. Casi el 10%.

Emser XXI añade, además, que hay que tener en cuenta que las extracciones de caudales de agua «se reducirán más en la zona de Jesús» cuando se ponga en marcha el nuevo depósito de Can Fornet y se ejecuten los proyectos de renovación de las redes de distribución de Jesús, que «presumiblemente se llevarán a cabo a medio plazo».

Aqualia, la concesionaria del servicio municipal de abastecimiento de agua de Santa Eulària, también emitió en enero de este año un informe que justifica que en Jesús hay suficientes recursos hídricos para atender la demanda del hospital proyectado, con una superficie de 33.777 metros cuadrados. Señala que en 2019 el volumen de agua extraído de pozos en la zona de Jesús y Talamanca fue de 360.667 metros cúbicos de agua, pero a mediados de se año se incorporó a la red de suministro parte del caudal producido en las desaladoras. Así, en 2020 las captaciones subterráneas se redujeron a 274.032 metros cúbicos (el resto se completó con agua desalada), mientras que, el año pasado, de los pozos se consumió un total de 217.852 metros cúbicos. En todo caso, hay que tener en cuenta que estos datos se corresponden a los de los dos años de la pandemia del covid, con una actividad turística muy por debajo de lo habitual.

La concesionaria del servicio de agua concluye que es «posible con las redes existentes» aportar 90 metros cúbicos diarios para la apertura del hospital proyectado por «tratarse de un edificio de servicio esencial». El informe recomienda, eso sí, la instalación de un depósito insular y, por otro, la renovación de las dos redes de abastecimiento. Aqualia considera que se deben sustituir las antiguas canalizaciones de PVC de 110 milímetros por otras de mayor diámetro.

La Comisión de Medio Ambiente de Balears informó a favor de la evaluación de impacto ambiental del anteproyecto del hospital en 2010 con la condición, entre otras, de que la concesionaria del servicio de agua obtuviera el permiso de Recursos Hídricos para que todos los pozos que abastecen la zona fueran declarados de uso urbano, así como el incremento del volumen anual de estas captaciones.

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