Alcaraz: «Estoy más cabreado que una mona y el vestuario, igual»

Lucas Alcaraz tuvo que morderse la lengua para no despotricar sobre la actuación del colegiado madrileño Gálvez Rascón, pero dejó varias perlitas en su crítica hacia el arbitraje y el grave perjuicio que a su juicio resultó para su equipo en la amarga derrota frente a Las Palmas.

«Estoy más cabreado que una mona, y el vestuario igual, treinta y tantos cabreados», señaló el preparador andaluz tras referirse a varias jugadas en las que el colegiado no aplicó el mismo criterio para unos y otros.

«No me gusta la autocomplaciencia, creo que hay que estar orgulloso del equipo y del rendimiento», indicó Alcaraz sobre la actuación de los suyos «en un contexto difícil siendo últimos». «El equipo ha tenido siete u ocho ocasiones de gol clarísimas, en la primera parte hemos minimizado a Las Palmas y en la segunda ha habido varias decisiones desacertadas», resumió el preparador granadino, que no ocultó sus impresiones sobre lo ocurrido, con «tarjetas a favor y en contra que han ido condicionando el juego». «Luego hemos tenido dos errores puntuales y hemos perdido el partido, pero incluso con inferioridad numérica y un ritmo de falta y tarjetas en contra como mínimo curioso, hemos podido empatar el partido», añadió.

Remarcó el preparador celeste el buen papel de los suyos en los dos últimos encuentros ante rivales, Eibar y Las Palmas, «con más presupuesto y en teoría mejores jugadores, pero yo hoy no cambio a mis futbolistas por ninguno de la categoría», enfatizó.

«Igual que en el segundo tiempo hemos fallado atrás, en el primero hemos fallado delante porque nos tendríamos que haber ido con más holgura en el marcador», subrayó Alcaraz, que definió el primer tiempo de su equipo como «inmaculado».

«No hemos tenido suerte en el remate para [lograr] un punto que hemos merecido de sobra, es bastante frustrante para los chavales por la carga que llevamos, pero tienen el refuerzo de que su entrenador está contento con ellos», explicó Alcaraz, antes de agregar, pidiendo perdón por la expresión, que «es el típico día de comer mierda ero de aprovechar ese motor para tirar para adelante». «De saber que siendo últimos nos van a pasar cosas así, pero eso tiene que ser el combustible para empezar la semana, es un combustible jodido porque preferíamos una victoria como refrendo al partido que hemos hecho», puntualizó.

Suscríbete para seguir leyendo