Prohens se convierte en presidenta autonómica y evita aliarse con Vox

El PP desbanca a Francina Armengol (PSOE) en el Parlament balear y decide gobernar en minoría tras alcanzar un acuerdo con la formación de ultraderecha en la que se incluyen 110 medidas programáticas para poner «fin a las políticas socialistas y separatistas»

Todos los candidatos insulares y municipales de la isla de Eivissa en la sede del Diario de Ibiza.  | VICENT MARÍ

Todos los candidatos insulares y municipales de la isla de Eivissa en la sede del Diario de Ibiza. | VICENT MARÍ

El pasado 29 de mayo el PP arrasó. Arrasó en el Parlament con 25 diputados. Barrió en el Consell de Ibiza, logrando mayoría absoluta, al igual que en todos los ayuntamientos, salvo el de Sant Josep, donde también ganó con holgura. El PSOE, por contra, cayó en desgracia perdiendo todos los feudos en los que gobernaba. Vox, por su parte, entró en el Parlament balear con ocho diputados.

Marga Prohens, como nueva presidenta del Govern balear, decidió gobernar en minoría después de alcanzar un acuerdo con Vox en el que se comprometió a dar estabilidad a cambio de 110 medidas programáticas para lograr el «fin de las políticas socialistas y separatistas».

La presidenta autonómica arrancó su mandato nombrando al ibicenco Antoni Costa portavoz del Ejecutivo autonómico y conseller balear de Hacienda. No se hizo esperar y Prohens, a pocos días de tomar posesión de su nuevo cargo, hizo efectiva la supresión del Impuesto de Sucesiones y Donaciones , tal y como ya había anunciado durante la campaña.

Pero no ha fue la única medida. Prohens visitó Ibiza para reunirse con las asociaciones contra el cáncer y en agosto anunció la aprobación de un decreto ley para declarar de «muy difícil cobertura» las plazas de la especialidad de Oncología del hospital Can Misses, triplicando el complemento salarial .

El decreto ley de vivienda llegó en octubre con el objetivo de abaratar la vivienda y clausurar los pisos de alquile turístico ilegal, una premisa reclamada por el Consell de Ibiza. Pero en estos meses, Vox ya ha tenido la oportunidad de tensar la cuerda poniendo en peligro el techo de gasto a cambio de implantar la libre elección de lengua en todas las etapas educativas. Una negociación que ha despertado ya el rechazo de la comunidad educativa. Desde el PP mantienen que el acuerdo, finalmente alcanzado en este mes de diciembre, «no impone la segregación».