El nuevo juzgado de Ibiza especializado en familia recibe sus primeros casos

Son las nueve de la mañana cuando cinco funcionarios de Justicia empiezan su jornada laboral en una de las oficinas del Cetis, todavía aséptica: apenas algunos ordenadores, una impresora y varios muebles ocupan el espacio del nuevo juzgado de Primera Instancia número 6, especializado en familia e incapacidades. Las estanterías aún no están ocupadas por el caótico mosaico multicolor de carpetas apiladas (cada uno de los juzgados alberga alrededor de unas mil) que contienen en su interior folios y folios con casos judiciales por resolver.

El juzgado se puso ayer en marcha y tardará «varias semanas en alcanzar la actividad plena», apunta el juez decano, Sergio González. A partir de este momento se irán asumiendo todos los asuntos relativos a familia e incapacidades para los que tiene competencia «exclusiva» pero no «excluyente». Así lo detalla Gonzalo Marco, el juez titular sustituto voluntario en el cargo y que está también al frente del Juzgado de Primera Instancia número 1. Marco se encargará del nuevo órgano hasta que se resuelva el concurso de jueces, lo que está previsto que suceda a mediados de abril.

A las doce y media de su primera mañana en el sexto juzgado de Primera Instancia los trabajadores se ponen ya en contacto con el Hospital Can Misses para ratificar el internamiento de un paciente en la planta de Psiquiatría. De este modo se estrena el nuevo servicio en sus especializaciones, una antigua reivindicación de la comunidad del sistema de Justicia de la isla. La exclusividad de materias se aprobó el pasado mes de enero después de que los jueces de instancia de Ibiza lo propusieran durante una Junta Sectorial. Las condiciones de la isla, que a pesar de no ser un territorio grande triplica su población en verano, han permitido aprobar la medida.

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Un 21% de otras materias

«Esto permite, además, tener un criterio unánime para estos temas», señala Marco. El juez decano ya había subrayado la importancia de que los asuntos de familia (divorcios y custodias, entre otros), e incapacidades (por ejemplo, medidas de apoyo para personas que tienen demencia o esquizofrenia), se resuelvan bajo un criterio unificado y no con cinco distintos como sucedía hasta ayer.

Además de estos asuntos exclusivos, el sexto juzgado asumirá un 21% de otras materias. Un porcentaje que al juez titular en funciones le parece, a priori,«escaso» pero destaca que se irá revisando cada dos años.

La necesidad de dos juzgados más de Primera Instancia en la isla se determinó en 2015, cuando únicamente había cuatro. «Ibiza tiene varias pecularidades que aumentan la litigiosidad, como asuntos económicos de mucha cuantía y el factor extranjero [población de otros países y turistas]», comenta Marco. En 2018 se creó el quinto juzgado de Primera Instancia y casi «una década más tarde» se inaugura el número seis.

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La plantilla está compuesta ahora por cinco trabajadores, la mayoría interinos, de los siete previstos: el juez titular sustituto, el letrado de la Administración de Justicia, Carlos Bendito (anterior titular en el Juzgado de Instancia número 4 y que ha pedido el traslado), un auxiliar judicial, un gestor y un tramitador.

«A lo largo de esta semana se irán incorporando e irán tomando posesión los que quedan», asegura Bendito, que añade que esta plantilla, de cara al futuro, deberá aumentarse hasta equiparar al resto de juzgados de Primera Instancia, que cuentan con nueve funcionarios.

Algunos de los trabajadores vienen de fuera pero han podido resolver el problema de la vivienda compartiendo habitación. Otros se han trasladado desde otros juzgados a este nuevo porque va a ser, por lo menos al principio, más «cómodo», califica el juez titular. «Ha habido muchos problemas para encontrar personal y aún no tenemos garantía de que puedan encontrar un alojamiento digno», señala, por su parte, el letrado de la Administración de Justicia.

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