Así se encuentra el Teatro Pereyra de Ibiza: las últimas imágenes de los trabajos de remodelación

Las lámparas de cristal ya aparecen colgadas del techo aunque todavía protegidas

Los colores rojo y amarillo y dorado predominan en la sala principal, donde ya están instaladas las molduras y barandillas de los palcos

Las obras del Teatro Pereyra de Ibiza avanzan y devuelven a este mítico espacio escénico a glorias pasadas. El alcalde Ibiza, Rafael Triguero, ha visitado esta mañana "las obras en el emblemático Teatro Pereyra de Ibiza", tal y como ha compartido en sus redes sociales.

"Un pedazo de historia que ha sido testigo de incontables momentos culturales en nuestra ciudad. Emocionante ver su renacimiento, pronto volverá a ser uno de los escenarios de la magia que nos define en nuestra ciudad", señala el primer edil.

Triguero ha realizado la visita junto a la primera teniente de alcalde, Gemma Marí. El alcalde ha compartido algunas imágenes de cómo se encuentran los trabajos de reforma del teatro.

Las lámparas de cristal ya aparecen colgadas y protegidas aún. Los colores rojo y amarillo y dorado predominan en la sala principal, donde ya están instaladas las molduras y barandillas de los palcos.

Pedro Matutes Barceló, director general de Sirenis Hotels & Resorts y copropietario de este emblemático edificio, aseguró a este diario el pasado mes de junio que las obras de reforma estarán listas «en el tercer o el cuarto trimestre de 2023»

Las obras de reforma en el exterior del Teatro Pereyra estaban ya entonces prácticamente terminadas. Se han restaurado los elementos de la balaustrada de la fachada principal, que da a la calle del Comte de Rosselló, se ha colocado la carpintería de madera y se ha pintado todo el inmueble por fuera.

Llama la atención el color, de «un rosa» menos apagado que el que lucía hace poco. «Hicimos un estudio de los pigmentos que históricamente se habían utilizado en la fachada del teatro y descubrimos que este rosa un poco más subido de lo que estamos acostumbrados era el original, así que es al que hemos recurrido empleando una pintura especial, mineral», explicó Pedro Matutes.

La voluntad de los propietarios, insiste en varias ocasiones, es que el aspecto del Pereyra sea lo más parecido al que tenía cuando abrió su puertas por primera vez, allá por abril de 1899, aunque entonces el inmueble, que se concibió como «un teatro circo», era más pequeño.

Ya han pasado quince años desde que lo propietarios hicieron la primera solicitud de licencia de obras y de actividad para este proyecto.