Sant Josep inicia un expediente de sanción por ruido tras la fiesta ilegal del camí de Can Truntoi

La Policía Local de Sant Josep se personó el miércoles en una villa situada en el camí de Can Truntoi en la que desde el lunes, interrumpidamente, se organizaba una fiesta ilegal, y tramitó la correspondiente denuncia. Ahora, el Ayuntamiento iniciará el expediente de sanción por exceso de ruidos. El Consistorio trasladará el acta policial al Consell de Ibiza para que actúe, si corresponde, en aplicación de la normativa turística. Esta vivienda de lujo cuenta con licencia turística, según se especifica en la plataforma digital en la cual se comercializa.

Un portavoz municipal explica que, al parecer, se cobraba una entrada para el acceso a la fiesta clandestina, pero los agentes, cuando se personaron en el exterior de la casa, no hallaron a ninguna persona que expediera entradas. La Policía Local se entrevistó con «el responsable de la fiesta e inquilino de la villa». Los agentes levantaron un acta y comunicaron al responsable que se le abriría un expediente sancionador, al tiempo que se le informó de la normativa actual en el caso de que no cesara con las molestias que estaba ocasionando a los vecinos, según explica el portavoz municipal.

Los vecinos se sienten «impotentes» ante una fiesta ilegal en Sant Josep

Vecinos consultados por este diario explican que el lunes ya llamaron a la Policía Local, pero que no sirvió de nada porque los agente dijeron que, como en ese momento la música no estaba muy alta, «no podían hacer nada». Sin embargo, las molestias continuaron, sobre todo el miércoles, cuando los vecinos requirieron de nuevo la presencia policial. Un vecino también pidió, infructuosamente, a los agentes que forzaran la retirada de vehículos aparcados en un terreno de su propiedad.

Cancelación del alquiler

Los vecinos de la zona aseguran que es la primera vez que en esta villa se organiza una fiesta ilegal, y temen que se pueda repetir. Un inquilino entró en la casa el domingo (la reserva era hasta ayer), pero la responsable de la vivienda canceló el contrato al día siguiente, el lunes, al constatar que se estaba organizando una fiesta con la presencia de decenas de personas cuando le había advertido de que estaba prohibido. Pese ello, el inquilino, según las fuentes consultadas, hizo caso omiso, se negó a abandonar la villa y siguió con la fiesta, que, según los vecinos, finalizó el miércoles.

El Ayuntamiento de Sant Josep informa de que, en este año, ya se han registrado un total de 476 incidencias (llamadas de denuncia) relacionadas con molestias por ruido y se han interpuesto 86 denuncias por alteración de la convivencia ciudadana, como el caso de la fiesta ilegal de la villa del camí de Can Truntoi.

Aparte, el Consell de Ibiza ha contratado de nuevo este verano los servicios de una agencia de detectives para recabar información sobre la organización de fiestas ilegales e infiltrarse en ellas para recabar pruebas con las que se puedan tramitar los expedientes de sanción. En todo caso, el vicepresidente primero del Consell, Mariano Juan, sostiene que, a diferencia de lo que sucedió durante la pandemia, se han reducido considerablemente este tipo de fiestas. «No digo que haya desparecido el problema, pero tiende a cero», dice.

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