La depuradora de Ibiza vierte aguas fecales al torrente de sa Llavanera desde hace seis días

La planta depuradora de Ibiza, que se encuentra en un estado de obsolescencia denunciado desde hace años por expertos y vecinos, vierte desde el viernes aguas residuales en el torrente de sa Llavanera. Vecinos de la zona critican que el olor estos últimos días es "insoportable" y que, además del caudal, en el lecho del torrente se acumula material fecal, "sobre todo junto al hotel de cinco estrellas" situado entre las avenidas de Joan Carles I y Vuit d'Agost. "La imagen es patética", advierten.

Desde la conselleria balear de Medio Ambiente explican que el pasado viernes, la planta registró una "incidencia  en el sistema eléctrico provocada por la llegada de una gran cantidad de toallitas". Estos elementos causan infinidad de problemas en los sistemas de depuración y alcantarillado de las islas.

Los vertidos se iniciaron el pasado viernes y continúan hoy, según han confirmado los vecinos.

Los técnicos responsables de la planta, en cuanto lograron solucionar el problema provocado por las toallitas, procedieron, "como siempre, a limpiar y desinfectar", se supone que tanto los elementos de planta como el tramo del torrente afectado por el vertido de aguas fecales.

Además del olor que provoca el material fecal que ha derramado la planta, en el torrente los vecinos han localizado los restos de un ave, que no han sido retirados. Se encuentran justo en el tramo del torrente que corre en paralelo al establecimiento hotelero de cinco estrellas Ibiza Gran Hotel.

Como publicó Diario de Ibiza el pasado mes de mayo, 79 depuradoras gestionadas por la Agencia Balear del Agua trataron el año pasado 50,21 hectómetros cúbicos de aguas residuales, lo que representó un incremento del 14,2 % respecto a 2021. Este incremento es más notable en Ibiza (21,6%) y en Formentera (23,8%) que en Mallorca (13,1%) y Menorca (9,5%), donde, a diferencia de las Pitiusas, no se ha superado aún la cifra de caudal depurado en 2019.

Según los datos recogidos por la conselleria de Medio Ambiente en su último informe anual sobre saneamiento y depuración, la depuradora de Ibiza incumple los parámetros de la directiva europea sobre la calidad mínima del caudal resultante del tratamiento.

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