Llorenç Córdoba se sienta hoy solo en el pleno del Consell por primera vez

Los consellers de Sa Unió lo han conseguido. Si no pasa nada extraordinario, el presidente del Consell de Formentera estará hoy solo en la mesa que preside las sesiones plenarias de la institución después de que la junta de portavoces aprobara, ayer, la propuesta de los conservadores de sentarse alejados de su todavía líder. Además, la iniciativa recibió el voto afirmativo de Córdoba, ya que la petición la había presentado el grupo mayoritario en la institución y ello obliga a su aprobación.

Será la imagen que escenifique que el presidente está solo.

Tanto el PSOE como Gent per Formentera (GxF) votaron ayer en contra de la propuesta de Sa Unió. Los socialistas lo hicieron, apuntó su portavoz, Rafael Ramírez, por «la imagen triste, desastrosa» que esta medida ofrece de un presidente que, al fin y al cabo, sigue representando a la isla.

Una situación «lamentable»

«Es lamentable la situación en la que está dejando a la institución» esta crisis en el equipo de gobierno, que para el portavoz de los socialistas, «tiene una salida muy complicada» y «va para largo».

Los ocho consellers de Sa Unió agrandan de esta manera la brecha con el candidato con el que ganaron las elecciones de mayo del pasado año, y al que han expulsado del grupo por la profunda crisis que abrió el lunes 27 de noviembre. Ese día, y de manera unilateral, sin avisar a sus socios de coalición (PP y Compromis, él es independiente), anunció que no descartaba retirar su apoyo incondicional al Govern del PP en el Parlament, donde es diputado. Y no dijo los motivos sobre los que basaba esta amenaza hasta varios días después.

Sa Unió y las respectivas directivas del PP y de Compromís confirmaron la expulsión el 12 de eneroa. Los motivos, la pérdida de confianza de los ocho conseller hacia el que fuera su líder por haber pedido, supuestamente, sobresueldos al Govern. Esto hizo que Sa Unió pidiera la dimisión del presidente pero Córdoba, que se ha negado sistemáticamente a hacerlo al entender que no existe ninguna prueba de las acusaciones de sus excompañeros, que además niega.