Motor - Rally Dakar 2023

Toni Vingut regresa de su hazaña pensando en correr el Dakar 2024 en ‘buggies’

El piloto ibicenco es recibido con honores por sus familiares y amigos a su llegada a la isla tras completar su cuarto Dakar en la sexta posición de quads

Rubén J. Palomo

Rubén J. Palomo

Toni Vingut llegó ayer sano y salvo a la isla tras su memorable participación en el Rally Dakar 2023, donde logró su mejor clasificación en las cuatro ediciones disputadas con un sexto puesto en la general de quads después de 14 durísimas etapas.

Sus familiares y allegados le aguardaban en la terminal de es Codolar cuando apareció de una pieza y con una sonrisa triunfal a las cuatro en punto de la tarde. Después de abrazar a sus padres, a su novia y a su madrina, compartió sus vivencias con los medios de comunicación y puso rumbo a Sant Antoni, donde fue recibido con honores en el Ayuntamiento de su localidad.

Vingut, que resultó el tercer piloto europeo de su categoría, algo que desconocía al llegar, confesó que la presente edición ha sido «complicada porque lo han preparado más largo y más duro y porque ha llovido muchos días». Con la ropa mojada y las botas caladas tuvo que afrontar jornadas marcadas por las dunas, las rocas y la falta de asistencia en las dos etapas de ‘maratón’, las más duras del evento celebrado en el desierto árabe. «Fue lo más complicado y estresante. El primer día tuve una fuga de aceite, hice un parche con una masilla pero no tenía aceite para reponer. Era una etapa muy complicada con muchas dunas, con bastantes elevaciones, tuve suerte de acabar la etapa pero pensé que tendría que abandonar. Estuve muy cerca del límite», admitió Vingut.

Tras un 2022 «decepcionante» al tener que abandonar por el grave accidente sufrido, el ibicenco de 47 años despide esta edición «muy contento» y «motivado» de cara al Dakar de 2024, en el que aspira a participar en la modalidad de ‘buggies’, menos exigente físicamente y donde se compite con copiloto. «Me gustaría probar en ‘side by side’ (el nombre oficial). No sé si encontraré algún patrocinador. Si no, seguiré en quads. Cada vez voy aprendiendo más y voy más preparado, así que pienso que lo puedo hacer un poco mejor cada año», señaló el piloto ‘portmanyí’ antes de reconocer que le gustaría alcanzar el podio, si bien al encontrar el quad «muy duro y cansado» ve más factible ese objetivo en la categoría de ‘buggies’.

Por último, Vingut agradeció el apoyo recibido desde Ibiza. «Tengo toda una lista de mensajes, no doy abasto. Allí no tengo tiempo ni cobertura en algunas etapas para contestar, ahora lo haré uno por uno, y agradecer todos los mensajes de apoyo», concluyó.

Más temor que el propio Vingut padecen sus familiares durante las interminables jornadas del Dakar. Su padre, Bartomeu Vingut, reconoció que han vivido la cita saudí «preocupados» aunque «orgullosos» de su hijo. «Sufrimos un poco pero ha llegado bien, que es lo importante», subrayó.

Su madrina, María Vingut Ribas, explicó muy sonriente que estaba «feliz y orgullosa» de la actuación de Toni y con resignación advirtió que «están acostumbrados a sufrir cada año» y que basta que le digan «que no vaya» para que acuda a la siguiente edición.

Por último, su madre, Rita Rigall, confesó que a diferencia de años anteriores, en esta edición le mostró su completo apoyo: «El año pasado tuvo este accidente. Siempre ha ido para adelante pero este año era más duro el Dakar. A mediados de verano le dije que aunque nunca le hemos apoyado mucho porque tenemos miedo, este año le dije, ‘adelante, adelante, estamos contigo’. Estaba más tranquilo y lo ha hecho mejor nunca».

Cuatro ediciones impredecibles

El Dakar es una carrera impredecible y Vingut lo sabe bien. El piloto del Motoclub de Formentera i Ibiza, con amplia experiencia en quad cross y motos de agua, afrontó su cuarta participación en la cita más dura del planeta. En 2020 abandonó en la penúltima etapa cuando estaba en el top-10 por una rotura de motor. En 2021, el motor volvió a fallar en la penúltima jornada y tuvo que completar los 300 km que le faltaban de noche. Llegó a meta sin poder descansar pero cumplió su objetivo de llegar a la meta final en la 9ª posición.

Después de tantos contratiempos, llegó al Dakar 2022 mejor preparado que nunca y con ganas de ganar una etapa y mejorar en la general, pero en la etapa 1B sufrió una caída en el km 135. Se despertó en medio del desierto y a día de hoy sigue sin recordar nada de los 15 km previos a su accidente. Quería continuar. El golpe que se había dado en la cabeza no le permitía valorar bien la situación, ya que no sabía que se había roto la pierna derecha, cinco costillas y la mandíbula. Tuvo que abandonar.

En el Dakar 2023, el de Sant Antoni se ha rehecho, haciendo gala de su madurez en carrera, y ha completado el trabajo que dejó pendiente hace un año con la sexta plaza de la general.

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