Adiós a la suciedad en el lavavajillas: el truco del palillo que está usando todo el mundo

Es un horror cuando sacas los platos del lavavajillas y siguen llenos de comida y oliendo mal

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Adiós a la suciedad en el lavavajillas: el truco del palillo que está usando todo el mundo

Adiós a la suciedad en el lavavajillas: el truco del palillo que está usando todo el mundo / Pixabay

Parece sencillo, pero todo lo que rodea al lavavajillas tiene su truco: cómo hacer una carga correcta, cómo ahorrar en el detergente, cómo dejar los platos más brillantes...

Hay muchas personas que tienen preferencias definidas sobre cómo cargar un lavavajillas. De hecho, una encuesta de Bosch encontró que el 40% de las parejas se pelean por este tema. Pero además de evitar discusiones, cargar un lavavajillas de la manera correcta tiene otros beneficios, ya que al hacerlo no solo los platos estarán más limpios, sino que también cargará más platos y será más fácil descargarlos.

Y recuerda que espaciar adecuadamente los platos evitará que se astillen y rompan, ya que evitará que golpeen entre sí.

El truco del palillo

Poner una carga en el lavavajillas y ver que los platos salen apestosos y llenos de residuos de comida no es la forma favorita de nadie de terminar un día ajetreado. Pero antes de que te preguntes si tu lavavajillas se ha vuelto demasiado viejo , haz una pausa y hurga en tu cerebro para saber cuándo fue la última vez que limpiaste el lavavajillas. Además, ¿desatascaste los brazos aspersores mientras los limpiabas? Si no, es hora de sacar un palillo de madera y ponerlo a trabajar limpiando los brazos aspersores.

Los lavavajillas (y, por extensión, sus brazos rociadores) se llenan de una gran cantidad de productos asquerosos, desde partículas de comida pegajosas o quemadas, grasa, plásticos y espuma de jabón hasta depósitos minerales. De alguna manera, todos encuentran formas de alojarse en las boquillas de los brazos, reduciendo su eficiencia y obstruyendo el proceso de enjuague. 

El proceso

Comienza quitando las rejillas del lavavajillas para dejar bien a la vista el brazo rociador adjunto a su parte inferior. Ahora, inspecciona las boquillas que arrojan agua en busca de obstrucciones de comida o desechos. A continuación, consulta el manual del usuario para obtener instrucciones personalizadas sobre cómo retirar el brazo rociador de tu modelo. Si bien no es obligatorio separarlo, hacerlo garantiza una limpieza profunda. Dicho esto, la mayoría de los lavavajillas incluyen una simple perilla de bloqueo para sacar el brazo inferior. Mientras sostienes el brazo desprendido, mete el palillo con cuidado en los agujeros. Para una limpieza profunda, combina agua tibia y unas gotas de vinagre en un recipiente y remoja el rociador hasta que esté completamente limpio. Sécalo y vuelve a colocarlo en su sitio. No olvides girarlo para asegurarte de que funciona libremente.