El Consell de Ibiza pide a la DGT radares móviles para controlar la velocidad en Can Guillemó

El conseller de Infraestructuras Viarias del Consell de Ibiza, Mariano Juan, ha pedido formalmente a la Dirección General de Tráfico (DGT) que habilite radares móviles en el tramo de la red viaria que transcurre por el barrio de Can Guillemó para poder realizar controles de velocidad en este punto de la vía, que acumula varios accidentes graves.

En un comunicado, Juan señala que el cruce de carreteras en este tramo del municipio de Sant Antoni es peligroso y aunque la velocidad fijada es de 50 km/h, recuerda que a lo largo del año 2023 se produjeron una serie de accidentes muy graves. Por este motivo, señala que es necesario el control de la velocidad de los vehículos.

Tragedia anunciada en Can Guillemó

El conseller explica que se hace esta petición como medida temporal “mientras la Dirección General de Tráfico resuelve la petición que hemos hecho desde el Consell en reiteradas ocasiones de instalar un radar fijo de control de velocidad en este punto de la red viaria insular”.

Urgencia por la peligrosidad

En este sentido, el conseller señala que debido a "la peligrosidad de este punto", tanto para los vehículos como por los peatones, a causa de la excesiva velocidad con la que se circula, esperan “una respuesta afirmativa y rápida a una petición que se viene reiterando desde ya hace años”.

Juan explica que esta instalación de radares es una de las actuaciones necesarias para garantizar la seguridad en este punto, en el que hasta el momento el Consell de Ibiza ha mejorado la señalización del semáforo con señales luminosas, con la reducción de la velocidad máxima del tramo de 80 km/h a 50 km/h.

Además, se ha adjudicado, con un contrato menor por importe de 12.039 euros (IVA incluido), la redacción del proyecto para la mejora de la seguridad en la carretera EI-600 a su paso por los barrios de Can Bonet y Can Guillemó.

Se trata del kilómetro comprendido entre los puntos 12,3 y 13,2, y en el proyecto se tiene que contemplar la mejora global de la seguridad de este tramo con la creación de un vial para peatones que conecte los barrios de Can Tomás y Can Guillamó, la instalación de un paso de peatones con semáforo y mejora del paso existente con la supresión del paso de peatones de la variante de Can Tomás. También la mejora del alumbrado público y la señalización y el ajardinamiento y embellecimiento del entorno, entre otras actuaciones.