Los vecinos vuelven a denunciar el colapso de Can Bonet por la fiesta de un club

La Asociación de Vecinos de Can Bonet volvieron a denunciar ayer las molestias y el colapso circulatorio que sufrió el barrio tras una nueva fiesta de El Cielo by Pacha, en el antiguo Gala Night, donde el miércoles pinchó el famoso dj Solomun.

Se da la circunstancia de que, el mes pasado, los vecinos ya protestaron ante el Ayuntamiento tras «el caos» generado por la fiesta de inauguración de este establecimiento. En ese momento, el equipo de gobierno anunció que se tomarían medidas para evitar que se repitieran estos hechos.

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Según detalla la presidenta de la asociación vecinal, Maria José Torres, en un comunicado, a partir de las nueve de la noche, los controladores del club ya no dejaron acceder a los vehículos al aparcamiento del recinto, ya que no quedaba más sitio. «El flujo de vehículos era continuo y las calles, bosques y el olivar del agroturismo vecino se colapsaron de coches», critica.

"Como un tetris"

A pesar de que en las esquinas de estas calles no se puede estacionar, y están señalizadas con la correspondiente pintura amarilla, «aparcaban todos los coches, encajándose en el cruce como si fuera un tetris». «A cualquier hijo de vecino nos caería una multa, pero no pasó ni un policía», lamenta una vecina de la calle Pruneres.

Esta misma vecina incluso indica que un controlador del club le quería impedir el acceso a la calle de su propio domicilio. «Otro controlador cortaba el paso a una vecina que iba con su hija pequeña y le decía que ya estaba completo».

«Los vecinos tuvieron que buscar aparcamiento lejos de sus domicilios e ir cargados con los cochecitos de bebé o las bolsas de compra», incide el comunicado. Según denuncian, numerosos asistentes a la fiesta orinaron en las calles y dejaron «un reguero de basura»

Ante estos hechos, la asociación ha vuelto a dar registro de entrada a un escrito en el Ayuntamiento «solicitando los motivos que justifican que la fiesta del miércoles fuera de interés general».

Igualmente, piden explicaciones por «autorizar la superación de los límites de ruido previstos en la ordenanza municipal, vulnerando así el derecho al descanso, a la tranquilidad y al goce del domicilio». La asociación también advierte de que, ante las siguientes fiestas previstas para el verano, seguirán «reclamando medidas para que se perjudique lo menos posible a los vecinos»