La inauguración de un local de ocio en Ibiza provoca quejas por el ruido y por los atascos y coches aparcados en el bosque de Can Bonet

La inauguración, el pasado sábado, de una fiesta en una nueva sala del barrio de Can Bonet causó atascos durante horas (entre las siete de la tarde y las 12 de la noche) en esa parroquia, a la que cientos de personas llegaron tanto en vehículos particulares como en taxis (muchos de ellos piratas) y VTC.

Ante la imposibilidad de encontrar aparcamiento, decenas de turismos particulares (en buena parte alquilados) acabaron estacionados en el bosque cercano, entre pinos y sabinas, incluso dentro de un terreno donde se cultivan olivos.

Muchos vecinos se quejaron, además, por el volumen de la música que procedía de la discoteca, a la que el Consistorio exoneró “del cumplimiento de los parámetros de ruido” durante el tiempo que durase “el acontecimiento en el lugar de desarrollo de la actividad”, mediante un decreto en el que se hace constar que consideraba la temática del evento “un acto positivo para mejorar la imagen de Ibiza, atraer turismo de calidad, y que por ello supone para el municipio un evento socioeconómico de importancia”.