Los muebles de Ikea acaban con los últimos bosques antiguos de Europa

Greenpeace presenta un informe en el que acusa a la cadena sueca de utilizar para sus muebles madera que proviene de áreas protegidas

Acción de Greeanpece en una tienda Ikea de Estocolmo para denunciar la tala de árboles

Acción de Greeanpece en una tienda Ikea de Estocolmo para denunciar la tala de árboles / Greenpeace

Los fabricantes de muebles que producen para Ikea se abastecen de madera de algunos de los últimos bosques antiguos que quedan en Europa en los Cárpatos rumanos, incluidas las áreas protegidas Natura 2000, según un nuevo informe presentado por Greenpeace.

Una investigación de esta asociación publicada el 10 de abril revela que siete fabricantes que producen los productos favoritos de todos los tiempos de Ikea, como las sillas INGOLF o las cunas y camas para niños SNIGLAR, están relacionados con la destrucción de bosques de alto valor de conservación.

Greenpeace encontró al menos 30 productos diferentes de estos proveedores en las tiendas Ikea de 13 países: Austria, Bélgica, Chequia, Finlandia, Francia, Alemania, Hungría, Italia, Israel, Polonia, Suecia, Suiza y el Reino Unido. Por lo que ha solicitado a Ikea que se convierta en parte de la solución en lugar de contribuir a las actuales crisis climática y de biodiversidad.

Robert Cyglicki, director de la campaña de biodiversidad de Greenpeace para Europa Central y del Este, afirmó: “Nuestro patrimonio natural no se puede convertir en muebles. Los bosques viejos son vitales para la salud del planeta y deben protegerse de inmediato. Ikea debe cumplir sus propias promesas de sostenibilidad y limpiar su cadena de suministro de la destrucción de bosques antiguos”.

El informe Reunir la verdad: Destrucción de bosques antiguos en los Cárpatos rumanos fue elaborado por Greenpeace en Europa Central y del Este. Los equipos de investigación siguieron la cadena de suministro, desde el análisis de permisos e imágenes satelitales de los sitios de tala en los bosques de Rumania hasta los depósitos de madera y los fabricantes de muebles, hasta donde terminan esos productos: en los estantes de las tiendas Ikea. Se descubrió que varios fabricantes obtenían madera de bosques de alto valor de conservación. Según información pública disponible, Ikea es el mayor cliente de productos fabricados por la mayoría de esas empresas, lo que implica una alta probabilidad de que la madera problemática termine en sus tiendas y muebles. Según el informe, esto parece cierto en el caso del fabricante Plimob, ya que Plimob produce prácticamente exclusivamente para la cadena sueca.

Muebles de madera sí, pero con cuidado

Greenpeace reconoce que los muebles en general son una buena forma de utilizar la madera, almacenar carbono y agregar valor a las materias primas, pero esto no debe suceder sacrificando los bosques con mayor diversidad biológica del planeta. Los Cárpatos son el hogar de osos pardos, linces, lobos y bisontes europeos y se encuentran entre los refugios de flora y fauna más importantes del continente europeo. El problema es que las empresas y las autoridades quieren evitar identificar áreas como bosques primarios o antiguos para evitar restricciones, lo que lleva al hecho de que sólo el 2,4% (1700 km²) de los bosques de los Cárpatos rumanos están actualmente protegidos contra la tala. Al mismo tiempo, los datos oficiales sugieren que alrededor del 7% de los bosques rumanos tienen más de 120 años.

Según la estrategia de biodiversidad de la UE, estos bosques deberían estar estrictamente protegidos. "Ikea debe convertirse en un pionero empresarial en la acción política necesaria para implementar medidas de protección de la biodiversidad efectivas y jurídicamente vinculantes para cumplir los objetivos de biodiversidad de Europa", concluye Greenpeace.