Más de un millar de firmas piden que Sa Peixateria matenga sus usos

La Asociación de Vecinos de la Marina entrega 1.150 rúbricas para que el Ayuntamiento de Ibiza revierta sus planes de convertir el histórico inmueble en un espacio polivalente con usos culturales

Bourbia, Vaquer y Triguero, antes de entregar las 1.150 firmas.

Bourbia, Vaquer y Triguero, antes de entregar las 1.150 firmas. / Vicent Marí

Bea Roselló

Bea Roselló

La presidenta y vicesecretario de la Asociación de Vecinos de la Marina, Nadia Bourbia e Isaac Vaquer, respectivamente, entregaron ayer 1.150 firmas en el registro de entrada del Ayuntamiento de Ibiza para reclamar que se mantengan los usos de Sa Peixateria.

«La intención es intentar paralizar o revertir el procedimiento que ha empezado el Ayuntamiento de cambiar el proyecto que ya había en marcha en Sa Peixateria», señaló Vaquer ante la intención del Consistorio de convertir el inmueble en un espacio con usos culturales.

El vicesecretario recordó que el equipo de gobierno, liderado por el alcalde Rafael Triguero, «decidió paralizar» las obras iniciadas en la anterior legislatura «sin informar a los vecinos ni a las asociaciones».

Triguero,  atendiendo ayer a los medios de comunicación.  | VICENT MARÍ

Triguero, atendiendo ayer a los medios de comunicación. | VICENT MARÍ / b.roselló. eivissa

En este sentido, los vecinos confían en que el millar de firmas sirvan, «por lo menos, para escuchar y plantear alternativas». Desde la Asociación de Vecinos de la Marina plantean o bien que se haga un mercado o, incluso, hacer un «centro mixto» en el que se combine la actividad de centro polivalente con la de mercado.

Tras la entrega de las rúbricas, Vaquer señaló que, «legalmente», no es viable hacer un centro polivalente, según explicó, debido a la protección de grado 1 que tiene el inmueble, catalogado con uso de mercado y comercial, según las prescripciones del Plan especial de protección y reforma interior (PEPRI). «Eso implica que no se puede modificar el uso», especificó.

Resultados negativos

El primer edil, que coincidió con Bourbia y Vaquer a las puertas del Servicio de Atención al Ciudadano (SAC) ubicado en el Cetis, señaló en declaraciones a los medios que, tras «muchos meses trabajando» con cadenas de supermercados para tratar la posibilidad de instalarse en el barrio, «a día de hoy, todos los resultados que hemos obtenido no han sido positivos».

Aunque no dejó claras las intenciones del Consistorio sobre el futuro de Sa Peixateria, Triguero insistió en que el objetivo es hablar con los vecinos para «saber cuáles son las reclamaciones y el planteamiento de vida» para dinamizar un barrio «que ha sido referente durante muchos años en la ciudad», dijo.

El primer edil indicó que se están «ultimando» los detalles técnicos para tener en las próximas semanas un anteproyecto de la reforma tanto de Sa Peixateria como del Mercat Vell.

En cuanto al cambio de usos, Triguero señaló que no es obstáculo, tal y como especificó Vaquer, ya que los técnicos «no lo ven así» y avanzó que, tras el inicio de las obras de remodelación, «se fue consciente que [el inmueble] no tendría las características para ser un bien catalogado».

El alcalde justificó la paralización de las obras por «diversas cuestiones técnicas» y por las «divergencias que se encontraron a nivel de desarrollo del proyecto a futuro», dijo.

Museo en Sa Pedrera

El primer edil quiso resaltar las actuaciones que se están llevando a cabo en el casco antiguo y avanzó que Sa Pedrera, la instalación que nació con el fin de ser centro de producción artesanal, se convertirá en el enclave para dar a conocer «la identidad, la cultura y el patrimonio» del municipio.

En este punto señaló que ya se está trabajando en el «proyecto de futuro» de este inmueble, ubicado a pocos metros de Sa Peixateria, tras reclamar a las empresas que «desalojaran» y «adecentaran» el espacio. Hay que recordar que tras su asunción del cargo como primer edil, constató que Sa Pedrera estaba siendo utilizada como almacén de material de obra.

Aunque no quiso entrar en detalle, señaló que los usos del recinto de Sa Pedrera serán «los adecuados y propios al estar anexo a la muralla, Patrimonio de la Humanidad, y va a ser un punto más que hará que nuestros vecinos visiten el barrio de sa Penya».

Local para los vecinos

Por otro lado, Triguero también avanzó que en las próximas semanas se cederá, de forma gratuita, a todas las asociaciones de vecinos de la Marina, sa Riba, calle de la Virgen y sa Penya un local para que se convierta en «su punto de encuentro y reunión». Se trata de unas dependencias municipales ubicadas en el callejón del Gallo, que llevan «años cerradas».

Finalmente, el primer edil destacó que desde el Ayuntamiento se quiere «incentivar» a supermercados y otros establecimientos para que se implanten en el barrio y mantengan la actividad más allá de los meses de verano. Se trata de «premiar el esfuerzo» de aquellos que abren también en invierno.

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