Una mañana diferente en la feria de Navidad de Ibiza

Una mañana diferente. Y muy esperada. Es lo que han vivido este lunes los usuarios de la Asociación de Madres y Padres de Personas con Discapacidad de Balears (Amadiba), que en vez de acudir al colegio de educación especial o al centro de día, como es habitual, visitaron la Feria de Navidad de Ibiza, instalada este año junto al primer cinturón de ronda. Los niños y adolescentes han disfrutado, por unas horas, de la feria en exclusiva para ellos.

Y es que abrieron algunas de las atracciones más populares para que los chavales de Amadiba pudieran montarse sin tener que enfrentarse a la multitud ni a los ruidos. Una actividad que llevan tres años realizando, según explican desde la asociación. «Entre nuestros usuarios hay un gran número de niños y jóvenes con alta intensidad de conducta que no gestionan bien las masificaciones, el ruido y la música muy alta», indica Daniel Angulo, director del colegio de Amadiba. De hecho, la feria ya anunció la semana pasada que los jueves, de cinco a siete de la tarde, rebaja la intensidad de la luz y la música para facilitar que puedan acceder personas con sensibilidad o con autismo.

Al menos una atracción de la feria de Navidad de Ibiza incumple la distancia de seguridad con el primer cinturón

La idea de la jornada de Amadiba surgió de la propia asociación, que se lo propuso a Paco Moreno, responsable de las instalaciones. «El objetivo es que todo el mundo pueda disfrutar de la magia de la Navidad», indica Moreno. Más allá de la diversión, que también es importante, el director destaca otro de los beneficios de una mañana en la feria para estos chicos con discapacidad y alteraciones conductuales: «A los alumnos les viene muy bien poder aprovechar las atracciones a nivel de estimulación sensorial».

Como no podía ser de otra forma, el broche final de tan intensa mañana lo pusieron los churros con chocolate.

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