El regreso de Cristina Molina como médica emérita impulsa las unidades de atención a la mujer de Ibiza

Cuentan en el Área de Salud pitiusa que cuando le propusieron a Cristina Molina volver a trabajar en lo que más le gusta, la atención a las mujeres, rompió un techo con la cabeza del salto de alegría que pegó. Una hipérbole que sirve para ejemplificar el «sí» inmediato que pronunció la médica, que se jubiló, con más pena que ilusión, el pasado mes de octubre.

Cristina Molina regresa a su labor medio año después de jubilarse para hacerse cargo de la coordinación de los dispositivos de Atención a la Mujer en Atención Primaria, confirmaron ayer desde la gerencia sanitaria. Esto, explican, será posible tras su nombramiento como médica emérita, lo que le permitirá seguir trabajando más allá de la edad máxima a la que se les permite trabajar a los facultativos. «Se están ultimando los trámites», indican desde el área sanitaria. Así, Molina será la segunda doctora de la isla a la que se concede este nombramiento, que ya tiene Maria Tresserra, a la que se encargó la coordinación de la atención a la cronicidad. Esto mismo hará con la estrategia de mujer Cristina Molina, que ya se ha reunido con el jefe del servicio de Ginecología y Obstetricia para preparar los detalles.

Su regreso es clave para darle un impulso a esta parte de la atención que se ofrece en Atención Primaria. Está previsto duplicar la Unidad de Atención a la Mujer de es Viver en el centro de salud de Sant Antoni. En estos momentos, en este ambulatorio se atienden consultas de ginecología dos tardes a la semana en las que hasta Sant Antoni se desplaza una de las especialistas del servicio de Ginecología y Obstetricia. A partir del próximo mes de junio, que es cuando Salud prevé que se ponga en marcha esta nueva unidad, se eliminarán estas consultas dos tardes en semana.

La Unidad de Atención a la Mujer del centro de salud de Sant Antoni atenderá todas las mañanas y, como la de es Viver, una tarde cada semana se reservará para que puedan acudir las jóvenes y adolescentes. Contará con un médico de Atención Primaria con formación en Ginecología e integrado en este servicio, una enfermera, administrativa y con la estrecha colaboración de una trabajadora social. Su puesta en marcha servirá no sólo para acercar esta atención a los usuarios del centro de salud de Sant Antoni, que cuenta con 24.000 tarjetas sanitarias asociadas, sino también para aligerar la presión de la unidad de es Viver, indica la gerencia, que señala que ya cuentan con el facultativo que se hará cargo de la unidad.

Ginecología en Santa Eulària

Al mismo tiempo que Sant Antoni estrena una Unidad de Atención a la Mujer, se reproducirá en el centro de salud de Santa Eulària el esquema de asistencia ginecológica de Atención Primaria que hasta el momento funciona en Sant Antoni. Es decir, que a partir del mes de junio contará con consultas de ginecología por las tardes. Eso sí con más frecuencia, ya que una especialista atenderá las citas todas las tardes. «Es el germen para una futura Unidad de Atención a la Mujer en Santa Eulària», señala un portavoz de la gerencia, que detalla que en breve se comunicará el nombre de la especialista del servicio que se hará cargo de esta consulta que se puede poner en marcha tras la contratación de una ginecóloga.

Se incorporará el próximo 20 de mayo, procedente del Hospital Infanta Leonor de Madrid, para cubrir varias reducciones de jornada que había en el servicio. Esto permitirá que otra de las especialistas que ya está trabajando en Can Misses pueda hacerse cargo de la nueva consulta de ginecología de Santa Eulària.

Así, la función de Cristina Molina como médica emérita coordinadora de Atención a la Mujer, será gestionar la asistencia en estos tres dispositivos que, por el momento, estarán funcionando: las unidades de es Viver y Sant Antoni y la consulta de Santa Eulària. Entre los objetivos que la gerencia le ha planteado a Molina se encuentran no sólo la coordinación de los servicios y la asistencia, sino también transmitir a los equipos el saber hacer y el talante que la han hecho tan querida en sus más de 30 años al frente de la unidad de es Viver.

Este espacio atendió el año pasado un total de 7.343 consultas médicas programadas y otras 1.173 urgentes. Además, el personal de enfermería asistió otras 5.987 citas previstas y 321 de carácter urgente. Esto, en total, supusieron 14.824 consultas, un 10,1% de ellas urgentes. Durante el año pasado no acudieron a las consultas que tenían agendadas un total de 1.690 pacientes, detallan desde el Área de Salud pitiusa, que señala que las matronas del centro de salud de es Viver asistieron a 6.466 mujeres.

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