Sant Josep sancionó a 40 taxis pirata y controló 20 fiestas ilegales durante el año pasado

El aumento de las incidencias se inicia en el mes de mayo, cuando antes se registraba en julio

EP

La Policía Local de Sant Josepregistró el año pasado un aumento del 13% en el número de incidencias atendidas con respecto a 2021, y contabilizó 11.432 actuaciones relacionadas con el tráfico, seguridad ciudadana y actividades y comercio. Según informó el Ayuntamiento, la labor policial se incrementó de manera importante desde el final de las restricciones con una subida de las incidencias del 46% respecto a las de 2018 (7.802).

En base a la baremación de la gravedad de las alertas recibidas, un total de 1.924 -el 16,9%- eran de prioridad alta; 3.105, de prioridad mediana y la mayoría, 6.423, tenía una prioridad baja.

La teniente de alcalde de Gobernación, Pilar Ribas, destacó en una nota que se vigiló especialmente el intrusismo, con 40 taxistas pirata sancionados; 80 controles a la venta ambulante en playas y 20 fiestas ilegales contra las que se actuó en verano, que son la mitad de las denunciadas hace un año.

Sobre el tipo de incidencia, 3.306 estuvieron relacionadas con el tráfico y la seguridad viaria (26,6 por ciento), con un «importante» aumento respecto al año anterior con 2.424 actuaciones atendidas.

También se amplió el periodo del año que concentra el mayor número de incidencias, con un aumento progresivo de mayo hasta finales de agosto, mientras que en años anteriores se registraba un fuerte pico en julio y agosto.

En cuanto a seguridad ciudadana, se registraron 1.799 avisos. En ilícitos penales, hubo 440 casos frente a los 593 de 2022.

Las intervenciones vinculadas a actividades y comercios se duplicaron respecto a 2021, pasando de 585 a 1.059. Por exceso de ruido en locales del municipio se pasó de 250 intervenciones en 2021 a 294 el pasado año, motivando 74 denuncias porque el establecimiento no contaba con limitador acústico o éste había sido manipulado.

En otros dos casos, se denunció al local por ignorar el requerimiento de parar la música. El pasado año, además, se realizaron 150 controles de actividad, ordenándose 83 precintos cautelares de los equipos de música.

Paralelamente, las actuaciones por conflictos vecinales descendieron, pasando de 1.626 incidencias a 941. El motivo puede ser el descenso de las fiestas en viviendas particulares, una vez se reabrió el ocio nocturno. Así, el número de quejas por ruidos en casas pasó de 1.428 a 800. Como resultado, 107 denuncias fueron interpuestas por alteración de la convivencia.