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El hospital privado que Tur Viñas proyecta en Ibiza requiere de hasta 551 profesionales a diario

El promotor responde que por el número de camas, por debajo de 200, no tiene la obligación de presentar un estudio sobre el impacto sobre la movilidad

La finca Cas Doctor Martí donde se proyecta construir un complejo sanitario privado. | VICENT MARI

El segundo hospital privado que se proyecta construir en Ibiza, en la finca Cas Doctor Martí, en Jesús, contempla que a diario pasaría un máximo de 551 trabajadores, tanto de personal sanitario como no sanitario. Se trata del «personal real» que sería necesario para la actividad que se pretende ejercer, según se especifica en la actualización del proyecto de actividad que se encuentra desde el lunes en exposición pública.

En este documento, de abril de este año, se especifica que la distribución del personal médico, tanto en plantilla como profesionales independientes, dependerá de muchos factores, «desde el modelo de negocio del socio operativo hasta las oportunidades de colaboración o la contratación de personal». Además, el personal de servicios auxiliares, que habitualmente se externaliza, está representado en este documento en un 80% de las necesidades de personal de plantilla si tuvieran que prestarse internamente.

La Policlínica Nuestra Señora del Rosario, el único hospital privado de la isla, cuenta con una plantilla de 650 trabajadores. El centro hospitalario y las instalaciones externas, como las de Vila Park, suman un total de 9.000 metros cuadrados, mientras que el complejo sanitario que promueve el empresario farmacéutico Juan Tur Viñas en Jesús tiene una superficie de 33.777 metros cuadrados (29.057 útiles). El hospital público Can Misses, con una superficie de cerca de 50.000 metros cuadrados, tiene una plantilla de personal sanitario y no sanitario de en torno a 2.000 personas.

El proyecto arquitectónico básico del complejo sanitario, que se ha modificado ya cinco veces, prevé la construcción de un edificio con sótano, semisótano, planta baja y primera, donde se prevé ubicar la unidad de hospitalización general, parte de paliativos y consultas externas. En la planta baja se contemplan más unidades de paliativos y consultas externas, además del bloque quirúrgico (cinco quirófanos), hospital de día, UCI, Urgencias, servicios de rehabilitación, obstetricia, laboratorio, rayos, recepción, oficinas, cafetería y tiendas. Por debajo, en el semisótano, las dependencias complementarias: suministros, tanatorio, farmacia, vestuarios de personal, tratamiento de hidroterapia, aparcamientos y más consultas externas. El sótano se destina íntegramente a aparcamiento. En total, se prevén 256 plazas de parking en todo el hospital.

El estudio de movilidad

El propietario de la Policlínica, Francisco Vilás, que desde hace años trata de tumbar este proyecto, ya ha advertido tanto al Ayuntamiento de Santa Eulària como al Consell de Ibiza de que en la última versión del estudio de movilidad (de enero de este año, anterior a la actualización del proyecto de actividad) se calcula el impacto de la actividad a partir de una plantilla de 80 trabajadores, cuando, además, en el anterior proyecto se hacía referencia a 175 personas.

Al ser preguntado por este baile de cifras, el promotor (Iniciativas Médicas de Ibiza y Formentera), responde que, con base en la ley de Urbanismo de Balears, no tiene la obligación de presentar un estudio de movilidad al no alcanzar las 200 camas hospitalarias. En concreto, se consideran grandes centros generadores de movilidad los hospitales que superan esta cifra.

El proyecto contempla 156 camas hospitalarias, 66 de la unidad de hospitalización general y 90 de cuidados paliativos, aunque en sus alegaciones Vilás advierte de que se deben sumar la camas y sofás cama previstos para acompañantes, por lo que se superan las 300. «Pueden generar un volumen de movilidad similar tanto unas camas como otras», justifica.

El nuevo proyecto amplía también el aforo del complejo sanitario, que pasa de 2.800 personas en la versión anterior, a 3.114. Al ser preguntado por los cambios introducidos, el promotor responde que la finalidad de los mismos, sin concretarlos, es la de «adaptar el proyecto a los parámetros urbanísticos que marca la concesión del interés general y subsanar deficiencias detectadas».

El Consell informa a favor del estudio de movilidad

El Consell de Ibiza emitió el pasado mes de abril un informe favorable al nuevo estudio de movilidad del complejo sanitario que el empresario farmacéutico JuanTur Viñas proyecta en Jesús. Este nuevo análisis del impacto que generaría el tráfico sobre el entorno del segundo hospital privado de la isla se presentó en enero de este año y se basa en las modificaciones introducidas en la tercera modificación del proyecto básico en junio del año pasado. Hay que tener en cuenta que, en febrero de 2009, ya se presentó una evaluación de los incrementos de carga sobre las redes de infraestructuras básicas y en noviembre de 2018 un estudio de movilidad.

En abril de este año, el promotor ha presentado una quinta versión del proyecto básico (el que está ahora en exposición pública) con modificaciones con respecto a la tercera, que es el que se ha utilizado para elaborar el último estudio de movilidad.

En su informe, el Consell considera «correcto» que se hayan utilizado los datos de tráfico de 2018, ya que los de 2020 y 2021 están «alterados» por los efectos de la pandemia del covid. Además, apunta que tras la apertura el año pasado de la variante de Jesús, se ha producido una reducción del tráfico de la travesía de este pueblo y la carretera de Cala Llonga, por lo que se considera que el último estudio de movilidad se ha hecho a partir de «un escenario más desfavorable que el actual». Agrega que la estimación de la movilidad que generará la actividad del hospital es «coherente» y destaca que el mismo estudio concluye que «la capacidad de las vías no se verá comprometida». 

El informe del Consell también concluye que el tráfico que generaría el hospital «no comprometerá el correcto funcionamiento» de la carretera de Cala Llonga.

El estudio de movilidad apunta que, en aplicación de la ley de Urbanismo, no existe la obligación de presentar este documento, pero se hace «dada la importancia del proyecto» y porque aporta más información a la Administración y supone una herramienta de planificación que puede ayudar a evaluar alternativas.  

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