La boda soñada de una pareja en Cancún se convierte en una gran pesadilla

Lizzeth nació en Bolivia, pero lleva media vida viviendo en España. Conoció a su novio Daniel en Madrid. Él es español. Decidieron casarse y su sueño era hacerlo en la ciudad mexicana de Cancún. Acordaron que la fecha del enlace sería el próximo día 10, la semana que viene, pero la ceremonia no se celebrará. Los novios y los invitados han sido presuntamente estafados por una agencia de viajes de Palma, que ya viene siendo investigada desde hace tiempo por la policía. A pesar de que sobre Francisca F., la responsable de la agencia Sayme Travel, ya pesan varias denuncias por estafa, la mujer ha seguido vendiendo paquetes de viajes, pero no ha cumplido sus compromisos.

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Estos novios de Madrid querían que a su boda en México asistieran sus familiares y sus amigos más próximos. Al tratarse de un viaje en grupo, al asistir 34 invitados que se desplazarían a Cancún desde España, Bolivia, Chile e Inglaterra , los novios buscaron una agencia especializada en este tipo de eventos. Buceando por internet encontraron a la agencia de viajes y organización de bodas Sayme Travel, que trabaja sobre todo online y que está ubicada en Palma. Según explicó una de las invitadas a la boda de Cancún, hace un año que los novios contrataron a esta agencia. A su responsable nunca la vieron en persona, pero sí hablaron con ella a través de una conexión en vídeo. La gerente de esta agencia se mostró dispuesta a organizar el viaje, proponiendo un pago aplazado, que debía ingresarse en la cuenta bancaria que ella misma facilitó. Cada invitado debía abonar unos 1.800 euros. Todos ellos ya han pagado el precio acordado. El viaje empezaba el día 7 y finalizaba el 13.

La familiar de la novia explicó que los invitados crearon un grupo de WhatsApp para estar informados de las últimas novedades del viaje. A este grupo incorporaron a la organizadora de la boda. «Durante muchos meses estuvo ausente del grupo. Le pedíamos que nos informara de determinados detalles del viaje, pero nunca contestó».

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A medida que se acercaba la fecha del enlace, la gerente de la agencia retornó al grupo. Fue informando de las últimas novedades del proyecto, eso sí, sin facilitar nunca la más mínima documentación que demostrara que los billetes de avión estaban reservados y el hotel pagado.  

«Cuando faltaban dos semanas para el viaje le exigimos que nos facilitara información sobre los vuelos para ultimar el trámite de embarque del avión». A partir de este momento empezaron a recibir toda clase de excusas para no cumplir con las exigencias de los clientes. La agente de viajes les decía, a través de varios mensajes, que ella facturaría el embarque de todos, porque se trataba de un viaje en grupo. Y, además, insistía en que esta gestión no se podía realizar hasta pocos días antes del viaje al que, por cierto, ella también se iba a incorporar, ya que iba a asistir a la boda.

«No entendíamos la razón por la que no facilitaba la documentación, pero dijo que en España se actuaba de esta manera. Como confiábamos en ella, nunca sospechamos nada», señala.

A medida que iban avanzando los días, el nerviosismo por la falta de noticias concretas iba en aumento. La agente de viajes llegó a decir que si había clientes que no confiaban en ella, que no pasaba nada, que devolvería el dinero. «Era una forma de asustarnos», asegura una de las perjudicadas.

A pocos días antes del enlace se destapó el engaño. De pronto, Francisca F. abandonó el grupo de WhatsApp. Escribió un mensaje electrónico a la novia, diciéndole que lo sentía mucho, pero que había sido imposible reservar los vuelos y no podía hacer nada para solucionarlo. 

«Todos se pueden imaginar el disgusto que tienen los novios. Una persona en la que confiaban ha jugado con sus sentimientos y les ha dejado sin boda. Sin duda les ha estafado», señalaba una de las perjudicadas, que aseguró que la novia lleva días que no deja de llorar y se teme que entre en un proceso depresivo.

Tanto los novios, como el resto de invitados, tienen previsto denunciar a la responsable de esta agencia de viajes de Palma. Sería una más a la larga lista de denuncias que ya acumula esta mujer.