¿Es malo bañar a mi perro? La respuesta te sorprenderá

Esto es lo que tenemos que hacer con nuestras mascotas

R. P.

04 DIC 2023 13:54

Seguro que en más de una ocasión has escuchado a alguien decir que es malo bañar a los perros. Pero, ¿es cierta esta afirmación? ¿es malo bañar a mi perro? La respuesta te sorprenderá.

Y es que como aseguran en la clínica veterinaria Zarpa, "existe la creencia de que bañar muy seguido a un perro es perjudicial para su salud, y lo cierto es que es verdad, los perros no requieren de un baño tan constante como los humanos". Como ejemplo, explican que si quisieras bañarlo todos los días como si fuese una persona "el baño se convertiría en algo perjudicial para su salud".

Eso si, esto no quiere decir que no se deba bañar nunca a nuestro perro, ya que en la medida adecuada, es realmente beneficioso para él porque elimina la suciedad, el mal olor y los agentes patógenos que lleva consigo la mascota".

Entonces, ¿con qué frecuencia tengo que bañar a mi perro? Pues todo depende de varios factores como el pelaje, la edad, la época del año o su estado de salud.

En cuanto al pelaje, cuanto más pelo tengas, habrá que bañarlo con más asiduidad. Los de pelo largo pueden bañarse cada cuatro semanas, llegando a alargarlo a las ocho semanas en el caso de los que tengan el pelo corto. También es recomendable reducir los baños a lo mínimo en invierno y consulta siempre antes con tu veterinario en caso de que tu perro tenga algún problema médico.

Cuidado de las mascotas

El baño de los perros es una parte fundamental del cuidado de las mascotas y juega un papel importante en su salud y bienestar. Aunque los perros no necesitan bañarse con la misma frecuencia que los humanos, es esencial realizarlo de manera regular para mantener su higiene y prevenir problemas de piel y pelaje.

En primer lugar, la frecuencia del baño depende del tipo de pelaje y del estilo de vida del perro. Los perros de pelo largo pueden requerir baños más frecuentes para evitar enredos y nudos, mientras que los de pelo corto pueden necesitarlo menos. La mayoría de los expertos recomiendan bañar a un perro cada 4-6 semanas, pero esto puede variar.

El proceso de bañar a un perro implica varios pasos importantes. En primer lugar, es crucial elegir un champú adecuado para perros, ya que los productos diseñados para humanos pueden causar irritación en la piel de los perros debido a su pH diferente. Antes de comenzar, es importante cepillar al perro para eliminar pelos sueltos y enredos.

Una vez que el perro está listo para el baño, se debe utilizar agua tibia para mojarlo por completo, evitando que el agua entre en sus oídos. Se aplica el champú en todo el cuerpo, asegurándose de enjabonar bien, prestando especial atención a las áreas sucias o con mal olor. Es fundamental evitar que el champú entre en los ojos o la boca del perro.

El baño

Después de enjuagar completamente el champú, es importante secar al perro con una toalla o un secador de pelo a baja temperatura. Algunos perros pueden sentirse incómodos con el ruido del secador, por lo que es importante acostumbrarlos gradualmente a este proceso.

El baño de los perros no solo tiene beneficios estéticos, sino que también contribuye a la salud de su piel y pelaje. Elimina la suciedad, el polvo y los alérgenos que se acumulan en su pelo, lo que puede reducir las alergias en los miembros de la familia. Además, el baño regular puede prevenir problemas de piel como la dermatitis o las infecciones por hongos.

También es una excelente oportunidad para revisar la piel del perro en busca de anomalías como pulgas, garrapatas o áreas irritadas. Si se encuentran problemas, se pueden abordar de inmediato.

En resumen, el baño de los perros es una parte esencial del cuidado de las mascotas. Realizado de manera adecuada y con la frecuencia apropiada, contribuye al bienestar y la salud de los perros, al tiempo que fortalece el vínculo entre el dueño y su mascota. Es importante recordar que cada perro es único y puede tener necesidades de baño específicas, por lo que es aconsejable consultar con un veterinario o un peluquero canino si se tienen dudas sobre el cuidado adecuado del pelaje de una mascota.