I Festival Intercultural de Can Bonet

Para bailar tinikling y comer chipa en Ibiza

Gastronomía y danza filipina, tarraconense, ibicenca y paraguaya en el primer Festival Intercultural que celebra el barrio portmanyí de Can Bonet, ses Païsses y Sol y Descanso con motivo de las fiestas patronales de la Sagrada Familia

Sopa y chipas paraguayas, frita de matanza y sobrasada, bibingka y pansit filipinos son algunos de los platos que, por tres euros la tapa, pudieron degustar el sábado los asistentes al I Festival Intercultural de Can Bonet. En la carpa, llena de público, bailaron, además, los grupos folklóricos Esbart Dansaire Rapitenc (de La Ràpita), de la Comunidad Filipina ibicenca (cuyo centro neurálgico es la iglesia del barrio, a cuyo frente está el párroco de esa nacionalidad Virgilio Bago), la Hermandad Rociera, el grupo de danza Panambi Veve y la Colla de Can Bonet.

Los 15 integrantes del Esbart Dansaire Rapitenc, que bailaron sus habaneras y jotas improvisadas de rondaia, vinieron invitados por la Colla de Can Bonet. Les acompañó la edil de Cultura de La Ràpita, Noelia Belmonte, cuyo propósito era aprovechar el acto para invitar públicamente al equipo de Gobierno de Sant Antoni a visitar su pueblo cuando los balladors ibicencos fueran a danzar allí, pero ninguno de sus representantes, ni siquiera el edil de barrio, asistió al acto.

VÍDEO | Así ha sido el primer Festival Intercultural Can Bonet

Mariposas voladoras paraguayas

Causaron sensación las polkas de las «mariposas voladoras» (tanto las niñas como las adultas), que es, como explicó la presidenta de los paraguayos, Evelyn Pereira, lo que significa en guaraní Panambi Veve, así como el espectacular tinikling filipino, baile en el que dos grupos de dos mujeres deslizan y golpean dos cañas de bambú entre ellas y contra el suelo, mientras un par de bailarinas saltan entre el espacio que queda entre las cañas, con el peligro de que les destrocen los tobillos.

Suscríbete para seguir leyendo