A partir de mañana, martes, los ciudadanos que lo deseen podrán recurrir a las farmacias para realizarse un test de antígenos con garantías y supervisados por un profesional sanitario que luego comunicará el resultado al Servei de Salut, tanto si es positivo como si es negativo, ha revelado la consellera de Salud, Patricia Gómez, en la presentación de la nueva colaboración de su departamento con el Colegio de Farmacéuticos (COFIB), una colaboración que ha admitido que ayudará a descongestionar una saturada Atención Primaria.

La consellera, que ha recordado que esta ayuda farmacéutica está dirigida tanto a las personas que no saben realizarse un autotest de antígenos como a aquellas que lo quieren hacer bajo el control de un profesional sanitario como son los propios farmacéuticos.

En caso de que así sea, el farmacéutico instruirá al usuario para hacerse correctamente la prueba 'in situ' e interpretar el resultado de la misma. También valorará la sintomatología y los criterios de inclusión en el grupo de personas vulnerables mediante una entrevista y cumplimentando los campos de un formulario específico.

Hay que señalar que, antes de sacar adelante el procedimiento, el farmacéutico debe explicar la importancia de notificar el resultado al sistema de salud y ofrecer al usuario la posibilidad de que sea la farmacia quien se encargue, para lo que deberá firmar un consentimiento informado, que es un documento con el que autoriza a la farmacia a notificar el resultado del test.

En caso que el resultado del test sea positivo, el farmacéutico ofrecerá consejos para que el usuario cumpla el aislamiento y lo remitirá a la página web 'Covid' del IbSalut para que obtenga más información; le informará sobre la sintomatología de alarma que le obliga a contactar con el sistema sanitario y le orientará para que, según cómo evolucione, solicite desde la misma web que le hagan el seguimiento sanitario.

Además, el farmacéutico generará y entregará un certificado del resultado positivo a petición del usuario; orientará a este sobre el procedimiento que debe seguir para solicitar la baja laboral, si la necesita y notificará el resultado del test al Servicio de Salud mediante el formulario alojado en la plataforma digital desarrollada al efecto.

Será el propio usuario quien tendrá que tramitar la baja laboral a través de la aplicación presentada la semana pasada. La consellera ha admitido que algunas personas menos duchas en el manejo telemático podrían requerir ayuda para realizar el trámite de la incapacidad laboral y ha apuntado a que en las farmacias también podrían ser asesoradas para completar el trámite sin problemas.

Por su parte, el Servicio de Salud notificará el resultado a la Dirección General de Salud Pública y Participación para facilitar la vigilancia epidemiológica de la pandemia.

Mientras, en caso de que el resultado del test sea negativo, el farmacéutico indicará al usuario que, aun así, debe mantener las medidas preventivas; generará y entregará un certificado del resultado negativo a petición del usuario; registrará la información en la hoja de Excel de gestión interna de la farmacia y notificará el resultado del test al Servicio de Salud mediante el formulario.

Asimismo, el Servicio de Salud notificará el resultado a la Dirección General de Salud Pública y Participación para facilitar la vigilancia epidemiológica de la pandemia.

Tanto Gómez como el presidente del COFIB, Antoni Real, han revelado que esta tarde ya se podrán hacer algunos autotest en las farmacias acreditadas para hacerlos, unas cincuenta hasta el momento, pero que los resultados no comenzarán a comunicarse al Servei de Salut hasta mañana, martes.

Por su parte, Real ha señalado que el convenio tiene una vigencia de tres meses aunque ha confiado que esta situación epidemiológica no se prolongue más allá de tres semanas. El presidente ha señalado que pese a que unas 170 farmacias habían mostrado su intención de adherirse a esta iniciativa, hasta el momento solo se han acreditado unas 50 y ha atribuido este bajo número a que algunas de ellas no reunían las condiciones para realizar los test en lugares aislados e independientes de las propias farmacias o que otros establecimientos no podrían comenzar ahora al tener a trabajadores de su plantilla de baja por covid-19.