El «desafío» de completar plantillas de los hoteles de Ibiza por la falta de vivienda

Completar las plantillas sigue siendo casi misión imposible para los hoteleros. En la cadena Azuline ponen todas las facilidades posibles para fidelizar a sus trabajadores, como cursos y una temporada más extensa de lo habitual en algunos de sus hoteles.

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Pero ni por esas: «Es complicado. A pesar de eso, se reincorporan y a los pocos días ya faltan cinco o seis». Entre alojamientos se rifan la mano de obra. «Sigue siendo muy difícil», reconoce el presidente de Fomento de Turismo.

La oferta ilegal hace mucho daño en este sentido, pues ocupa recursos de alojamiento. Se habla de hasta 100.000 plazas ilegales. Si se arreglara eso, empezaría a resolverse el problema del alojamiento de los trabajadores», asegura Alejandro Sancho.

Para Vibra, que hace unos días puso un anuncio en este diario para completar su plantilla, «es un desafío». Se esfuerzan en dar alojamiento a sus trabajadores: disponen de 500 camas para sus 1.500 «colaboradores» en temporada alta, muchos de los cuales son residentes.

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