Detenido al intentar colar un sable de un metro de largo en los juzgados de Ibiza

Un ciudadano francés ha sido detenido hoy miércoles al intentar acceder a la sede judicial de Ibiza con un sable de alrededor de un metro de longitud. La detección del arma ha sido posible gracias al responsable de seguridad de los juzgados de la plaza de sa Graduada.

El hombre retenido y puesto posteriormente a disposición del Cuerpo Nacional de Policía de la comisaría de Ibiza, se disponía a entrar en los juzgados junto a su abogado para llevar a cabo "unos trámites". Portaba lo que parecía un simple "palo de madera" que, no obstante, ha levantado las sospechas del jefe del dispositivo de seguridad de las instalaciones judiciales. Antes de pasar por el punto de control, se le ha pedido el arma, que el jefe de seguridad ha inspeccionado brevemente. Al moverlo, ha podido percibir que algo se movía y vibraba en su interior.

«El marino Riquer es el David Beckham de los corsarios ibicencos»

La funda

Preguntado el sospechoso por su procedencia, ha explicado que se trataba de un bastón que le habían regalado. En su parte superior, el responsable de seguridad ha descubierto un pequeño dispositivo que, al presionarlo, le ha permitido retirar el bastón para dejar al descubierto un sable de alrededor de un metro de longitud.

El sospechoso se ha tenido que identificar y ha sido retenido en los juzgados a la espera de que llegara una dotación del Cuerpo Nacional de Policía, que se lo ha llevado detenido a comisaría como presunto autor de un delito de tenencia de arma blanca (son ilegales cuando la hoja excede los 11 centímetros de longitud).

El punto de seguridad de los juzgados de Ibiza se ha encontrado de todo en los últimos años. Desde bolígrafos 'espía', con los que se puede grabar y hacer fotografías, hasta tarjetas de crédito modificadas para poder usarlas como pequeños puñales. Hace ya 16 años, se incautaron de un móvil que había sido modificado y podía ser utilizado como un arma de fuego.