Llama la atención

Que la parada de taxis de la avenida de Bartomeu Roselló de Vila, que fue recuperada hace pocos meses por el actual equipo de Gobierno del PP, después de que fuera eliminada en el anterior mandato, no esté teniendo ningún uso, mientras que la cercana de la avenida de Santa Eulària esté siempre llena. El Ayuntamiento dijo que la había restituido por petición del sector, así que no se entiende ni la petición ni la decisión, aunque los taxistas digan que con el descenso de la actividad «se utilizará».

Que ayer en el pleno de Vila, la segunda teniente de alcalde, Catiana Fuster, pidiera «perdón» a los pocos segundos de darse cuenta de que se estaba dirigiendo en catalán al portavoz de Vox, Héctor Rubén Andrés, y cambiara de inmediato al castellano.

Que el Govern balear no se moje sobre cómo va a ser la gestión de los residuos en Ibiza una vez que se complete la capacidad del vertedero. El Govern pone la pelota en el tejado del Consell y dice que aún no se ha decidido entre incineración o traslado de los residuos a Mallorca.