Suspendido por cuarta vez el juicio por la estafa de más de 93.000 euros al Consell

La vista, señalada en la Audiencia Provincial de Gijón, se cancela a petición de la defensa para evitar problemas de compatibilidad de uno de los magistrados

Los acusados, en el banquillo antes de la suspensión.

Los acusados, en el banquillo antes de la suspensión. / P.P.

Pablo Palomo

Suspendido por cuarta vez. El juicio por el que una pareja, un hombre y una mujer bielorrusa, se enfrentaban a cuatro años de cárcel cada uno por estafar al Consell de Ibiza, no se celebró ayer en la Audiencia Provincial de Gijón por la incompatibilidad de uno de los magistrados que conformaban el tribunal.

La jueza aceptó la petición del abogado de la defensa, que pidió suspender la sesión debido a que este magistrado participó en la instrucción del caso, tomando declaración a los procesados e incluso rechazando pruebas. «Consideramos que la imparcialidad no se compromete, pero vamos a suspender para evitar posibles nulidades», expresó ayer la jueza encargada del caso.

Esta decisión se conoció casi a las once la mañana de ayer, cuando el juicio estaba fijado para las diez. Los acusados, así como su abogado, y la abogada de la acusación, en este caso el Consell de Ibiza, fueron llamados a la sala cuando pasaban diez minutos de en punto. Fue entonces cuando el letrado de los procesados expresó su petición de suspender el proceso por la cuestión anteriormente mencionada. Esta petición motivó un receso de unos diez minutos para deliberar.

Al final fue más de media hora lo que necesitó el tribunal para adoptar su decisión. Durante ese tiempo, los acusados aguardaron pacientemente en compañía de su abogado a las puertas de sala. Lo mismo hizo la abogada de la acusación, que estuvo caminando de un lado hacia al otro del pasillo del Palacio de Justicia gijonés pegada a su teléfono móvil.

Una mujer se desploma

Se produjo una anécdota durante rato. Una mujer de mediana edad que nada tenía que ver con el proceso y que aguardaba sentada en unos bancos, frente al Servicio de Orientación Jurídica del Colegio de la Abogacía de Gijón, una sala que se encuentra prácticamente pegada a la Audiencia Provincial, se puso de pie y se desplomó. Había sufrido un mareo. Fue atendida por el abogado de la acusación, por uno de los inspectores que participaron en la investigación del caso y también por uno de los acusados, el varón. Se repuso sin mayores problemas.

Finalmente, sobre las diez y media la mañana fueron todos de nuevo llamados a la sala para comunicarles que se suspendía el juicio. Según explicaron las partes era, con esta, la cuarta vez que había que posponer.

Desde mayo de 2018

Los hechos que se juzgan se remontan a mayo de 2018 cuando los dos acusados abrieron una cuenta bancaria en Gijón a nombre de una empresa llamada Obras, Promociones y Proyectos del Cantábrico. Haciendo uso de esta compañía, sin actividad ninguna según la Fiscalía, enviaron a través del servicio de Correos un formulario tipo ficha de Terceros al Consejo de Ibiza en el que figuraba como remitente una UTE (Unión Temporal de Empresas) que sí mantenía relaciones laborales con la entidad balear, pero incluyendo el número de cuenta de la empresa de ellos. Lograron así tres pagos: uno de 31.347,02 euros, otro de 40.297,90 euros y otro de 21.375,45 euros.