Vila busca plazas de ‘parking’ hasta debajo de los contenedores

El Ayuntamiento de Ibiza está buscando plazas de aparcamiento hasta debajo de los contenedores. Y no es una expresión. Es cierto. Así lo asegura el alcalde de Ibiza, Rafael Triguero, durante la comida en Diario de Ibiza cuando la subdirectora del rotativo, Rita Vallès, saca en la sobremesa uno de los temas que más preocupan a los ciudadanos. Tanto a los del municipio como a quienes vienen de otros puntos de la isla para trabajar, hacer compras o divertirse. «Queremos que vuelvan», indicaTriguero, cuando la subdirectora le recuerda que la falta de aparcamiento disuade a muchos de acudir a la ciudad cuando temen que la única opción para dejar el coche sea alguno de los aparcamientos privados de pago, con las elevadas tarifas. «Es como pagar otra cena», ironiza Vallès. El alcalde sonríe y detalla que, según los cálculos que han hecho, en la ciudad faltan unas 2.000 plazas de parking.

De hecho, consciente de que el aparcamiento es uno de los principales problemas de Vila, conseguir estas 2.000 plazas fue una de sus promesas electorales más repetidas durante la campaña electoral del 23M.

Estos aparcamientos, explica, saldrán de la reforma de la E-10 (el primer cinturón de ronda) y también del proyecto que prevé reconvertir la zona del Mercat Nou y el parque de la Paz. «Una iniciativa muy criticada por algunos», recalca el alcalde de Vila, que recuerda que la intención del Consistorio es «dinamizar» la zona ampliando la zona verde del parque de la Paz a la zona que ahora ocupa el mercado y creando mil plazas de aparcamiento subterráneas.

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En las próximas semanas, además, el Ayuntamiento revisará la ubicación de los contenedores de basura que salpican la ciudad para tratar de recolocarlos de forma que se puedan ganar hasta 324 plazas. Esta medida servirá para mejorar la situación antes de que puedan abordarse las otras dos grandes reformas con las que se crearán esos alrededor de 2.000 estacionamientos. La concejala de Vías Públicas, Obras y Movilidad, Blanca Hernández, ya está trabajando en esta idea, indica Triguero, que insiste: «Hay que volver a ofrecer la posibilidad de aparcar en Vila».

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Este proyecto, continúa, se complementará con una adecuación u ampliación de los aparcamientos disuasorios. Alguna de ellas, ya en ejecución. Eso sí, pide también a los ciudadanos que hagan uso de la nueva línea de autobús, la L50B, que recorre los aparcamientos de las afueras y los conecta con el centro. Una línea que se ha puesto en marcha recientemente, después de que el Ayuntamiento lo soliciara al Consell de Ibiza.

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De la misma manera, el alcalde explica durante la comida su plan para reordenar el tráfico en la ciudad. Éste prevé que las seis principales vías de Vila sean de un único sentido, haya algún aparcamiento más, los semáforos estén sincronizados y, además, cuenten con un sistema digitalizado que sirva para orientar a los conductores sobre las zonas en las que, en ese momento, hay aparcamientos disponibles, lo que servirá, en teoría, para reducir las vueltas que dan los coches hasta dar con una plaza.

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