Diario de Ibiza

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El aeropuerto de Ibiza registró en julio una media de 84 vuelos diarios de ‘jets’

El tráfico de aviones privados despega tras el final de las restricciones a la movilidad y crece un 31% en vuelos y un 26% en viajeros con respecto a 2019

Aviones privados estacionados en la plataforma situada en la denominada ‘zona aire’ de la terminal de es Codolar. DI

El tráfico de pasajeros en aviones privados en Ibiza está registrando este verano cifras nunca vistas antes, confirmando la tendencia de los últimos meses precisamente como consecuencia de la crisis sanitaria que ha puesto en jaque al sector de la aviación comercial. Mientras decenas de compañías aéreas se ven abocadas al cierre por la falta de actividad en el último año y medio por las restricciones a la movilidad, la aviación privada está viviendo un momento muy dulce.

En Ibiza durante el pasado mes de julio la terminal registró una media diaria de 84 aterrizajes y despegues de jets, una cifra «nada normal», como reconocen desde el sector. Estos vuelos privados transportaron una media de 235 pasajeros cada jornada durante el mes analizado, según la misma fuente.

La estadística de Aeropuertos Nacionales y Navegación Aérea (AENA) indica que el pasado julio el aeropuerto gestionó 3.103 movimientos de estas aeronaves privadas (contabilizando siempre los aterrizajes y los despegues), lo que representa un incremento del 31,2% con respecto a julio de 2019, el último año antes de la crisis sanitaria. Entonces, los movimientos de jets en Ibiza fueron 2.618.

Con respecto al mismo mes del año pasado, el porcentaje aumenta prácticamente en la misma proporción, un 33,6%. La subida no es muy pronunciada porque en julio del año pasado se levantaron gran parte de las prohibiciones a la movilidad y muchos turistas optaron por utilizar este medio de transporte en detrimento de los vuelos comerciales.

Evitar los aeropuertos

Varias empresas del sector (todas las consultadas pidieron mantener el anonimato) explican que ése es precisamente uno de los motivos principales del despegue de este sector: los viajeros con elevado poder adquisitivo prefieren evitar las concentraciones tanto en los vuelos comerciales como en los aeropuertos ante la amenaza del covid.

Con respecto al tráfico acumulado, en los primeros siete meses de este año los gestores del aeropuerto han registrado el paso de 8.448 aviones privados por la única pista de es Codolar acondicionada para acoger aterrizajes y despegues.

Esta cifra es un 31,2% superior a la registrada en el mismo periodo de 2019 (6.437) y un 140,3% más elevada que la del año pasado (3.515).

El número de pasajeros de jets también se incrementa de manera significativa este año. De enero a julio han pasado por la terminal ibicenca un total de 20.738 usuarios de esta alternativa de transporte aéreo.

Por la única pista de es Codolar pasaron en el mes de julio 3.103 aviones privados, entre aterrizajes y despegues

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La estadística facilitada por AENA arroja en este apartado un crecimiento del 150,9% con respecto al mismo periodo del año pasado (8.264 viajeros) y del 26% frente a hace dos años, cuando se contabilizaron 16.463.

Las cifras oficiales indican un crecimiento continuado este año en el tráfico de aviones privados. Tanto con respecto al año de la pandemia como con el ejercicio de 2019, durante todos los meses de este año se ha incrementado el número de jets y de pasajeros que han transportado en el aeropuerto ibicenco.

Familias enteras toman el relevo a los dj y productores

Las empresas que prestan servicio a las aeronaves y a los pasajeros de la aviación privada en Ibiza (’handling’) tienen claro que la crisis del covid es una de las causas del fuerte incremento en la actividad que están registrando este año. Gran parte de los clientes de este tipo de transporte intenta evitar las terminales de los aeropuertos, donde se concentra mucha gente, así como los vuelos comerciales, normalmente abarrotados y donde si bien es obligatoria la mascarilla y se regenera el aire del interior, no se respetan las distancias de seguridad. Además, el cliente familiar ha sustituido al del ocio nocturno, cerrado desde el verano pasado. Ya no vienen tantos dj o productores musicales, pero sí familias de Francia, Reino Unido, Italia...

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