Vivienda | Alquiler turístico

Airbnb en Ibiza: el negocio millonario del 17% de comisión

Airbnb percibe hasta 6.000 euros diarios en concepto de comisión de servicio por la reserva de algunas de las mansiones de la isla

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Vista de la casa de Tagomago por la que Airbnb se lleva una comisión de 6.000 euros al día

Vista de la casa de Tagomago por la que Airbnb se lleva una comisión de 6.000 euros al día / Airbnb

Marta Torres Molina

Marta Torres Molina

Alrededor de un 17%. Ésa es la cifra mágica de Airbnb, el porcentaje de un negocio millonario. En algunos casos es un 16%, pero en la mayoría el número de oro es el 17,08%. Es lo que la plataforma ingresa en concepto de «comisión de servicio» por la mayoría de los alquileres turísticos que se reservan a través de la web. Una comisión que, en el caso de las viviendas de lujo, como las que se alquilan en la isla de Eivissa, pueden rentar a la plataforma cerca de 6.000 euros por noche.

Es lo que ocurre cuando alguien alquila la mansión de la isla de Tagomago, el alojamiento más exclusivo que oferta el portal en las Pitiüses: 35.000 euros por noche con la obligación de reservar por un mínimo de cinco. Esto supone que la estancia mínima en la villa obliga a desembolsar 204.894 euros (175.000 euros por el alojamiento más los 29.894 de la comisión). A pesar de ser la más cara, no parece ser, para nada, la más rentable para la plataforma, visto el calendario de reservas. Ahora mismo no hay ninguna fecha reservada para toda la temporada.

Los cinco alojamientos más caros de Airbnb en Ibiza

Una situación muy diferente a la de Villa Caroline, otro de los cinco alojamientos más caros de Airbnb en la isla para este verano. Se encuentra en Cap Martinet y el precio por noche varía. En el mes de mayo, pernoctar en ella cuesta 18.750 euros, cantidad que se reduce ligeramente en agosto, cuando la tarifa cae a 15.750. La estancia mínima en esta mansión, que tiene reservas ya para buena parte del verano, es de ocho noches. Por este tiempo, la comisión de servicio que se embolsa Airbnb es de entre 18.833 euros en agosto y 22.421 en mayo, unos 2.000 euros por noche. Un total de 3.075 euros diarios es lo que revierte en la plataforma de alquiler turístico por antonomasia la reserva de otro de los cinco alojamientos más caros de la plataforma en la isla de Eivissa: un yate de 38 metros de eslora y con jacuzzi.

En total, en la isla hay 24 alojamientos que superan los 10.000 euros por noche. Por el alquiler de éstas la plataforma percibe un mínimo de 1.708 euros por noche que se contrate a través de los anuncios del portal. Esto supone, en un solo día y teniendo en cuenta únicamente estas viviendas de ultralujo (contando con que estén alquiladas todas), por alguna de las cuales gana cerca de 6.000 euros diarios, más de 60.000 euros por noche. Hay que tener en cuenta, sin embargo, que hay 70 alojamientos en los que alojarse una noche cuesta más de 5.000 euros.

En total, Airbnb ofrece cerca de 4.000 alojamientos turísticos en la isla de Ibiza: 70 de más de 5.000 euros por noche, unos 750 de entre 1.000 y 5.000, casi 800 en los que alojarse cuesta entre 500 y 1.000 euros y la misma cantidad con tarifas entre los 250 y los 500, casi 700 en los que cobran entre 150 y 250 y otros tantos por menos de esa cifra. Dentro de este grupo, los alojamientos más económicos (camas en habitaciones compartidas, tiendas de campaña, literas, chozas...) cuestan unos 30 euros. Por estas últimas, la plataforma se lleva una comisión de cuatro euros.

En los casos de alojamientos con licencia turística, al hacer la reserva, el extra que cobra Airbnb no aparece como comisión de servicio sino como «impuestos», una cantidad que ronda el 10% del coste del alojamiento y que se suma a la tarifa. «Impuestos relacionados con el hospedaje, como el IVA, el GTS, el impuesto sobre el alojamiento o las tasas turísticas. VAT/GST», especifica la plataforma, que detalla: «En las zonas en las que Airbnb ha establecido acuerdos con las administraciones o está obligado por ley a recaudar y liquidar impuestos en nombre de los anfitriones, Airbnb los calcula y recauda de los huéspedes en el momento de la reserva. A continuación, Airbnb envía los impuestos recaudados a la autoridad fiscal aplicable en nombre de los anfitriones».

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