Desprendimientos

¿Por qué la zona de es Cubells y Porroig es un acantilado inestable?

La geóloga Sunna Farriol detalló en 2017 a Diario de Ibiza por qué la ladera sufre permanentes desprendimientos de rocas y deslizamientos de tierras: "Es imposible evitar que la ladera se mueva"

Mapa geológico de la zona.

Mapa geológico de la zona. / di

Sunna Farriol Cristóbal / Ibiza

En el momento en que el ser humano comienza a ocupar espacios donde los peligros naturales están presentes, como laderas de volcanes, lechos de ríos o torrentes, zonas costeras o pies de taludes, entran en juego la vulnerabilidad y la exposición. Por poner un ejemplo que los ibicencos conocemos bien, vamos a centrarnos en el caso específico de la costa sur de Ibiza, en concreto en el tramo que va de Cala Llentrisca a sa Caixota, después de que esta semana se haya producido un derrumbe en un acantilado de Porroig, una zona muy cercana.

En esta zona se llevan produciendo, desde siempre, movimientos de ladera, como el gran deslizamiento que ocurrió el 15 de septiembre de 2005 en sa Caixota y que provocó que el Residencial de Vista Alegre se derrumbara y múltiples viviendas unifamiliares quedaran gravemente afectadas.

El 19 de diciembre de 2016 y el 24 de enero de 2017, la carretera de es Cubells en dirección a Cala Llentrisca quedó cortada debido a una serie de desprendimientos rocosos y en la zona del gran deslizamiento se han detectado importantes movimientos de la ladera.

¿Por qué son tan frecuentes los deslizamientos y los desprendimientos en esta zona? ¿Qué hace que sea tan susceptible a sufrir estos tipos de peligros naturales?

Para responder a estas preguntas es necesario centrarse en la geología y el comportamiento de los materiales que afloran y en la pendiente de la ladera.

La edad de las rocas

Como se puede observar en el mapa geológico que hay sobre estas líneas, los materiales que predominan en ese sector corresponden a margas con intercalaciones rítmicas de calizas margosas del Cretácico inferior (entre 145,0 y 100,5 millones de años). En la parte occidental de la costa, en dirección a Cap Llentrisca, sobre la unidad anterior se encuentran unas calizas blancas del Cretácico superior (entre 100,5 y 86,3 Ma).

La primera unidad, de gran espesor (puede sobrepasar los 200 metros), se encuentra compuesta por una monótona sucesión de margas (arcillas ricas en carbonato cálcico) de color gris a beige entre las que se intercalan niveles de calizas margosas grisáceas. La segunda unidad corresponde a una sucesión de calizas tableadas de color blanquecino que esporádicamente pueden tener niveles margosos y cuyo espesor total oscila entre los 60 y más de 150 metros.

Las margas son materiales generalmente blandos y muy poco permeables, mientras que las calizas son rocas duras que permiten que el agua circule en su interior, debido a las fracturas y planos de debilidad que suelen presentar. Este hecho provoca que el agua freática (la que circula por el interior de la tierra y da lugar a los acuíferos) quede atrapada en las intercalaciones de calizas que, tanto en la base como en el techo, están en contacto con las margas, dando lugar a lo que se conoce como acuíferos confinados.

La causa de los deslizamientos

Por tanto, cuando se producen periodos de altas precipitaciones, los acuíferos confinados quedan saturados y dan lugar a acumulaciones de bolsas de agua en los contactos entre las intercalaciones de calizas con las margas, provocando que estos contactos actúen como niveles de despegue, ya que se pierde fricción entre materiales. Este hecho, combinado con la fuerte pendiente que presenta la ladera, hace que esta zona sea muy susceptible a sufrir deslizamientos de grandes volúmenes de tierra.

Por qué se desprenden las rocas. Los desprendimientos rocosos, que también tienen lugar en el mismo sector de la costa, son debidos al hecho de la existencia de una unidad caliza de espesor considerable situada sobre la unidad de margas. Como las margas son materiales blandos, fácilmente erosionables con la lluvia, las calizas van perdiendo soporte basal. Entre la desestabilización de la base del macizo calizo y la erosión meteorológica, las calizas se van fracturando e individualizando en bloques que pueden ser susceptibles de ser desprendidos.

La combinación de las características de los materiales geológicos que afloran en la zona y la pendiente de la ladera afectan considerablemente en la susceptibilidad (mapa de la derecha, abajo) a sufrir desprendimientos y/o deslizamientos.

Así, las zonas donde afloran las margas están clasificadas como roca blanda (en verde), mientras que en los sectores donde afloran las calizas blancas se clasifican como roca dura (en rojo).

De 30 a 35 grados de pendiente

En el mapa de gradientes (arriba a la derecha de estas líneas) se aprecia que la pendiente en la zona comprendida entre Cala Llentrisca y sa Caixota se encuentra en torno a los 30 y 35 grados(colores anaranjados).

Al solapar los dos planos anteriores se obtiene un plano de susceptibilidad a los desprendimientos rocosos en el cual se observa claramente que la zona que nos concierne presenta una susceptibilidad alta (rojo claro).

¿Es una zona apta para ser ocupada territorialmente? Una vez se llega a entender por qué la zona es susceptible, tanto a desprendimientos rocosos como a deslizamientos de tierra, cabe responder a la pregunta de si esta zona es o no apta para la ocupación territorial.

Mi opinión como geóloga es que no. El espesor tan elevado de la unidad de margas así como la elevada pendiente de la ladera, hace imposible el sostenimiento y la estabilización de estos materiales. Además, la modificación por la acción antrópica de la ladera ayuda a su inestabilidad.

Cuando se ocupa un área afectada por algún fenómeno natural éste pasa a convertirse en un riesgo natural para nosotros, ya que nos afecta directamente y nos causa daños económicos, materiales y, en ocasiones, llega a suponer la pérdida de vidas humanas.