PSG-Barça (X/21.00 h.)

Luis Enrique: "¿Quién representa mejor el estilo Barça, Xavi o yo? Sin ninguna duda, yo"

"Tengo una relación de amor total con el Barcelona desde hace muchos años, pero por delante está mi profesión", clama el técnico asturiano ante su reencuentro con el club azulgrana

El entrenador del Paris Saint-Germain, Luis Enrique Martínez,en rueda de prensa en la Liga de Campeones.

El entrenador del Paris Saint-Germain, Luis Enrique Martínez,en rueda de prensa en la Liga de Campeones. / EP

Francisco Cabezas

Luis Enrique Martínez no tiene por qué cambiar. En ocasiones, cuesta discernir entre la guasa y la firmeza, la ironía y la certeza. Pero es él, y solo él, quien domina el escenario. Tanto en la caseta, donde Mbappé ha tenido que acostumbrarse a sus métodos, como en la sala de prensa, donde lleva a los periodistas por donde él quiere, cargándolos de titulares, pero también consciente y seguro de haber alcanzado su objetivo. El principal, que el PSG, equipo al que pretende acercar a su primera Champions, se olvide de la presión en el duelo de cuartos que le enfrentará al Barcelona a partir de este miércoles en París.

Antes de asomarse a la sala de prensa de la ciudad deportiva del PSG en Poissy (a 30 km del Parque de los Príncipes), Luis Enrique jugueteaba con los medios oficiales del club. "¡Se acerca la fiesta!", decía entre risas, para después cambiar un poco al gesto de advertencia: "Mi mujer me ha comentado que cuando jugamos [con el Barça] en París, el día del 4-0... Fue intimidador. Una maravilla. Queremos que sea así".

Potencia en los mensajes

Ya en la salita donde debía comparecer ante el resto de periodistas, Luis Enrique, que se desperezaba y preguntaba tras la tercera pregunta si aquello había acabado, se dedicó a medir la potencia de sus mensajes.

Ninguno impactó tanto como el referido a la influencia que tuvo en el club azulgrana mientras él fue el entrenador. Un periodista le preguntó quién representaba mejor el estilo del Barça, si Xavi Hernández o él. Y Luis Enrique, artífice de la triple corona en 2015, no estuvo para monsergas: "Yo". Calló un segundo, y volvió: "Mirad los datos de posesión de balón, ocasiones de gol, presión alta, títulos... Sin ninguna duda, yo. Hay otros que opinan diferente. Pero no es una opinión. Son números. Soy yo".

Luis Enrique aprovechó para recordar que fue compañero de Xavi Hernández en el Barça. También su entrenador -le ofreció su puesto a Rakitic, que sería el titular en la última Champions ganada en 2015 en París antes de la despedida del egarense-. "Pero, como entrenador, a Xavi no lo conozco de nada". Y continuó: "No he tenido la suerte de que me entrenara. Conozco a Xavi como compañero, como jugador, pero como entrenador lo conozco como vosotros [dirigiéndose a los periodistas]. Eso sí, conozco muy bien al club. Pero no tengo la seguridad de que esto sea una ventaja, aunque tampoco un inconveniente. Estoy más que preparado para dar el máximo para mi equipo".

"Amor total"

A cuenta de ello, a Luis Enrique le insistieron sobre sus sentimientos ante la oportunidad de enfrentarse a un Barça del que es también socio: "Es un partido totalmente diferente. Pero en su día también le marqué goles al Sporting [el club donde se crio]. Tengo una relación de amor total con el Barcelona desde hace muchos años, pero por delante está mi profesión y el club que ha confiado en mí desde mi paso por la selección española".

Luis Enrique, en la rueda de prensa de París previa al duelo en el Parque de los Príncipes contra el Barça.

Luis Enrique, en la rueda de prensa de París previa al duelo en el Parque de los Príncipes contra el Barça. / EFE

Se quitó de encima el técnico del PSG las cuestiones clásicas sobre el favoritismo: "Me preocupa tan poco ser favorito o no... Casi prefiero que me pongáis como víctima".

Y, antes de irse de la sala, tuvo que referirse a la amenaza islamista que acecha a los partidos de estos cuartos de final de la Champions: "¿Quién no está preocupado? Es algo que espero que se pueda controlar, que sean simplemente amenazas, y no acabe en nada desastroso. Claro que preocupa".