Representar a España en un Mundial sale más caro en Formentera

Los regatistas del Club Surf Formentera Gala Fornès (sub 13) y Hugo Colomar (sub 15) se encuentran en Chipre disputando el Campeonato del Mundo de windsurf en la clase Techno 293 como integrantes de la selección española. Pero representar a España en un Mundial les costará dinero a sus familias. Y bastante más a la de uno de ellos por estar peor ranqueado en su categoría.

Los dos cadetes pitiusos se baten con los mejores del mundo en una cita para las promesas de este deporte, que arrancó ayer con las tres primeras mangas puntuables en aguas del Mediterráneo después de una primera jornada en blanco por falta de viento.

En la flota masculina sub-15, Hugo Colomar se situó en el puesto 32 de un total de 45 regatistas tras firmar un 28º, un 32º y un 36º en una jornada con vientos suaves. Gala Fornès protagonizó una actuación muy similar a la de su compañero, en la flota mixta sub-13, donde hoy afronta la segunda jornada de regatas desde la posición 29 de entre 42 participantes tras marcar un 38º, un 21º y un 27º. Hasta el domingo, intentarán remontar posiciones si el viento sopla con más fuerza, condiciones que les benefician, para dejar alto el pabellón formenterense, habitual en las grandes citas del windsurf.

Ayudas parciales y por ranking

Caso a parte es cómo han llegado los dos regatistas pitiusos hasta la isla mediterránea. Según explica la propia Federación Española de Vela en la convocatoria de los seleccionados, «el equipo nacional está subvencionado al 100% (excluyendo su manutención) desde el punto que se designe como salida de expedición hasta el punto destinado como fin de expedición».

El transporte de barcos o de regatistas hasta dichos puntos «irá a cargo de los regatistas», en este caso del club y las familias de Hugo Colomar y Gala Fornès. Debido a que no hay desplazamiento logístico, señala la RFEV, el equipo B y C (de Clase), donde está encuadrado Hugo por su ranking nacional, «no tiene ningún tipo de subvención por parte de la RFEV». «Se podrá ayudar en la coordinación, pero nunca en financiación. Lo referente a gastos de desplazamiento de este equipo de clase deberán ser asumidos por los regatistas y supervisado por el entrenador de clase o la secretaria nacional de la clase», culmina la federación española.

La triple insularidad de los formenterenses supone, por tanto, un importante agravio para la participación de estos deportistas en citas internacionales de la talla de un Mundial, donde suelen permanecer alrededor de una semana con los gastos que eso conlleva.

Álex Figueiras, coordinador del centro de deportes náuticos de Formentera, reconoce que son las familias y en algunos casos los clubes quienes sufragan el coste de participar en una competición internacional. «Muchas veces, en el caso de Formentera, el Consell Insular saca unas subvenciones de desplazamiento y por ahí las familias pueden recuperar parte de lo que se gastan en viajes así», asegura. También sucede, según apunta Figueiras, que regatistas clasificados renuncien a su plaza por este tipo de gastos, lo que también sucede en otros deportes minoritarios en los que al atleta le puede llegar a costar una fortuna representar a su país.

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