Terelu Campos llega a su límite por culpa de Alejandra Rubio

La presentadora no puede más

Terelu Campos .

Terelu Campos . / LA 1

Desde que su hija, Alejandra Rubio, apareciese besándose con Carlo Costanzia (hijo de Mar Flores), Terelu Campos ha limitado mucho sus apariciones televisivas al margen del porgrama en el que trabaja, 'Bake Off'.

La de Terelu Campos se ha convertido en la reacción más buscada desde que hace justo una semana la revista 'Semana' destapó, con unas apasionadas imágenes comiéndose a besos que no dejaban lugar a dudas, la incipiente historia de amor entre su hija Alejandra Rubio y Carlo Costanzia.

Una noticia bomba que sorprendía a la tertuliana en Málaga disfrutando de unos días de vacaciones y sobre la que, muy seria, dejaba claro que no tenía "abslutamente nada que opinar". "Jamás en la vida me he metido en la vida de Alejandra. Y quien diga que yo estoy enfadada, molesta, o triste, o alegre está mintiendo porque no me pronuncio sobre ello" sentenciaba ante los micrófonos de Europa Press.

Sin embargo, las especulaciones no han cesado y se ha llegado a afirmar que Terelu estaría muy disgustada con la relación de su hija, además de por el complicado pasado de Carlo y su historial delictivo, por su presunta enemistad con Mar Flores. Un enfrentamiento que nada tiene de cierto, como la presentadora aseguraba al regresar a Madrid este domingo: "Me da risa. No se puede cuestionar una relación que nunca ha existido. Nunca en la vida hemos tenido una amistad ni hemos salido de fiesta ni una cena... qué tendrá que ver. Que pertenezcamos al mundo mediático no significa que todos nos conozcamos" ha afirmado rotunda.

Desaparecida

A pesar de que la preentadora le quiera quitar hierro al asunto, lo cierto es que esta especie de romance está cambiando su vida, sobre todo a nivel profesional.

Desde que se publicaran las fotos de su hija y Constanzia, Terelu ha dejado de aparecer en los programas del corazón en los que trabaja en TVE, como es 'D corazón' y 'Mañaneros'. Esta actitud podría no haber sentado muy bien a sus compañeros de plató y demuestra que la presentadora se encuentra al límite.