El Parlament balear ha aprobado, con los votos a favor del PSOE, Podemos, Més y Ciudadanos, la abstención del PI y el rechazo del PP, la comisión de investigación sobre las autovías de Ibiza. Este órgano tratará de aclarar el abultado sobrecoste económico de esta obra pública, que según ha afirmado el diputado ibicenco de Podemos Aitor Morrás, acabarán costando 1.000 millones de euros, frente a los 9 inicialmente previstos. Esta cifra es la suma de la ejecución propiamente dicha, el canon de 20 millones anuales que cobra la empresa durante 25 años y otros pagos millonarios.

Morrás calificó las autovías de Ibiza como el exponente de "la época más voraz y depredadora del territorio que se ha vivido en Ibiza" y señaló que la comisión "se crea para conocer la verdad". Tanto él como el diputado de Més David Abril animaron al PP a votar afirmativamente a este órgano de investigación. "Si no tienen ustedes nada qué esconder ¿a qué tienen miedo?", preguntaron en varias ocasiones los diputados progresistas a las filas conservadoras. El diputado del PSOE Enric Casanovas se mostró partidario de acudir a la Fiscalía si como consecuencia de esta comisión aparecen nuevos indicios de delito.

La diputada de Ciudadanos, Olga Ballester, ha aproyado totalmente la creación de esta comisión, pero el portavoz de Proposta per les Illes (PI) ha justificado su abstención afirmando que este tipo de comisiones "a menudo sólo sirven para esparcir sospechas". "No nos podemos investir el papel de fiscales", ha dicho. Se da la circunstancia de que el actual líder del PI, Jaume Font, fue durante la época de las autovías el conseller de Medio Ambiente del Govern, como han recordado los diputados de izquierdas.

La portavoz del PP, Margalida Prohens, ha basado su intervención en resaltar la "total tranquilidad de este partido" y acusó a las formaciones del Govern de "estar obsesionados en perseguir al PP". También ha señalado que el caso de las autovías "ha sido reiteradamente analizado por los tribunales y reiteradamente archivado". También ha rendido homenaje a los exdiputados del PP Pere Palau y Mabel Cabrer (consellera de Obras Públicas en aquel momento) porque "fueron perseguidos".