La candidata del PP a la alcaldía de Sant Antoni, Pepita Gutiérrez, visitó ayer el futuro instituto de Sa Serra acompañada por un grupo de compañeros de partido entre los que estaban los candidatos al Consell y al Parlament, Vicent Serra y Pere Palau. Ante el edificio vacío, en el que no había más trabajador que un vigilante de seguridad, Gutiérrez señaló: «Como podemos comprobar, no hay obras, ni muebles y no tendremos instituto en septiembre».

La candidata y sus acompañantes decidieron después dar un paseo hasta la futura residencia y centro de día de Sant Antoni. Por el camino observaron cómo las malas hierbas han alcanzado una altura de medio metro dentro del nuevo instituto: «¡Tiene jardines interiores!», bromearon.

Los políticos continuaron haciendo gala de su buen humor al llegar a la paralizada residencia: «Nuestros hijos a lo mejor no ocupan el instituto como alumnos, pero puede que lo hagan como profesores. Peor lo tenemos nosotros para conseguir ingresar en esta residencia».

Vicent Serra, que era conseller de Servicios Sociales cuando se iniciaron las obras de este centro, relataba decepcionado: «Es una residencia que dejamos casi acabada y, a día de hoy, no hay indicios de que vaya a abrir de forma inmediata. Todo son excusas y lleva cuatro años de retraso, con lo que eso supone para los familiares que tienen a su cargo personas que deberían estar en esta residencia».

De sa Serra, Gutiérrez se desplazó hasta el mercado pagès, donde pidió el voto de las propietarias de los puestos de frutas y verduras y las animó a acudir a las urnas el domingo 22. «Estad tranquilos, que si hace falta votaremos dos veces», aseguró con ímpetu una resuelta comerciante a la comitiva. «Estamos de campaña. Hoy si os compramos lechugas será más tarde», comentó en otro puesto un risueño Palau.

Tras la breve visita al mercado, una pausa para almorzar en el Bar Benítez y después un paseo hacia el Mercat Nou, con numerosas paradas en comercios, hasta acabar el recorrido electoral en la plaza de España. Más tarde, Gutiérrez hizo públicas sus propuestas en educación para el municipio. Entre ellas, por supuesto, exigir a la conselleria que acabe el instituto de sa Serra y que elimine los barracones.