Subir a Dalt Vila en las noches de verano es siempre un placer. La historia se respira en cada rincón, unida al bullicio de los turistas que pasean por sus calles empredradas y se detienen en sus bares a tomar una copa. Entre todo este movimiento, los comensales encuentran un remanso de paz en Corsario Restaurant & Terrace, un oasis gastronómico situado en el hotel La Torre del Canónigo.

Pez diablo frito: ‘roja’ ibicenca frita entera y su sudado de ají amarillo. |

La cocina nikkei-mediterránea reina en este restaurante ubicado en la parte alta de Dalt Vila, considerada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. En un contexto tan especial, los clientes se sientan a la mesa para dejarse llevar por los sabores que unen Oriente y Occidente, en particular la esencia japonesa y la mediterránea.

El chef ejecutivo y su mano derecha dirigieron la cocina del restaurante Maido de Perú, que ocupa actualmente el sexto lugar en la lista The World’s 50 Best Restaurants, y han trabajado también entre los fogones de Central, que este año ha logrado el primer puesto en el prestigioso ranking mundial.

La carta de Corsario Restaurant & Terrace esconde muchas sorpresas. Como platos estrella se pueden mencionar las Navajas de La Torre (navajas frescas con emulsión de yuzu, gel de ponzu, rocoto parrillero y crujiente de arroz y trufa), el pez diablo frito (roja ibicenca frita entera y su sudado de ají amarillo), tartar de atún, vieiras, ceviche ibicenco o un suculento sashimi variado.

Imposible resistirse a las Navajas de La Torre.

Tras la cena, es posible alargar la sobremesa con un cóctel en la terraza para vivir esta experiencia gastronómica en todo su esplendor.

El restaurante se encuentra ubicado en el hotel La Torre del Canónigo, que pertenece al exclusivo sello de Small Luxury Hotel of the World, que ha sido decorado por el diseñador español más internacional: Lázaro Rosa-Violán.