De vez en cuando hay que parar, respirar y darse un capricho. Hotel Rural Can Curreu es el lugar perfecto para ello. Este alojamiento situado en Sant Carles propone escapadas de relax y gastronomía.

La casa original tiene más de 200 años, y se ha reformado respetando la arquitectura tradicional al tiempo que se adapta al descanso de los huéspedes.

Con una cocina basada en los productos mediterráneos de proximidad, el equipo conquista a los paladares más exigentes en un entorno natural único. Porque, además de los salones interiores, Can Curreu cuenta con terrazas en las que escuchar el sonido de la naturaleza.