La modificación del proyecto del paseo de la bahía de Portmany obliga a reiniciar su tramitación ambiental

La tramitación ambiental del proyecto de construcción de un paseo y un carril para bicicletas paralelo a la costa de la bahía de Portmany, entre Port des Torrent y Cala Gració, vuelve a la casilla de salida después de un año y medio de tramitación. La Comisión de Medio Ambiente de Balears ha archivado el expediente por «causas sobrevenidas»; en concreto, la presentación de otro proyecto por parte del Ayuntamiento de Sant Josep el pasado mes de noviembre que obliga a archivar el expediente anterior e iniciar otro nuevo.

Este cambio retrasa aún más un proyecto que acumula una demora considerable. En enero de 2018, hace ya seis años, el Ayuntamiento de Sant Josep y el de Sant Antoni, cuyos alcaldes eran entonces Josep Marí Ribas Agustinet y José Tur Cires, respectivamente, acordaron contratar un servicio externo para preparar las bases de la licitación de la redacción del proyecto.

Hace poco más de un año, en enero de 2023, tras la comisión de seguimiento de este proyecto, el Ayuntamiento informaba de que la tramitación ambiental del proyecto seguía «el calendario previsto» y que se esperaba obtener una resolución favorable «a lo largo de los próximos meses».

Ahora, el nuevo gobierno municipal ha cambiado de planes al introducir cambios en el proyecto presentado en Medio Ambiente. El alcalde de Sant Josep, Vicent Roig, justifica los cambios, que afectan al trazado en algunos tramos de los 10 kilómetros de paseo, para satisfacer las pretensiones formuladas por la Demarcación de Costas y para la mejora de las canalizaciones de la red de saneamiento porque, destaca, «no resolvía los problemas que afectan a la bahía».

En este sentido, por ejemplo, una de las estaciones de bombeo quedaba «en medio del paseo». «Ya que llevamos muchos años de retraso, preferimos cambiarlo ahora para hacer las cosas bien. Si ahora hay vertidos de aguas fecales sobre las rocas y luego se van a producir en el paseo... pues no vale la pena», justifica el alcalde. En este caso, la estación de bombeo se cambiará de ubicación. Así, Roig indica también que el proyecto anterior «no se había trabajado con la Agencia Balear del Agua y Calidad Ambiental (Abaqua)» del Govern.

Más expropiaciones

Fundamentalmente, los cambios que se han introducido en el proyecto son para intentar «reducir al máximo» la afección a la zona de dominio público de Costas y la mejora de las infraestructuras de saneamiento, como la retirada de algunas canalizaciones antiguas de fibrocemento. En algún tramo habrá que expropiar «un poco de terreno más» a propietarios, pero Roig asegura que se trata de «un mal menor».

El trazado inicial no varía sustancialmente, sólo se han introducido cambios concretos en algunos tramos, en los que, por ejemplo, «se estrecha el paseo o se segrega el carril bici del paseo» y éste transcurre por la parte interior de Cala de Bou. «Son pequeños cambios», reitera el alcalde.

Todo esto obliga a redactar un nuevo documento de alcance para la tramitación de la evaluación ambiental estratégica. Además, ahora se abre un nuevo procedimiento de audiencia a las administraciones afectadas para recabar sus consideraciones sobre el nuevo proyecto. Cuando se redacte el proyecto de construcción, éste se someterá a exposición al público en general.

Asimismo, el alcalde destaca también que el nuevo jefe de servicio de Territorio de Sant Josep, Sebastián Moles, «liderará el proyecto», con lo cual se «mejora la supervisión interna».

El coste de este paseo se estima en más de 20 millones. La mitad del coste total se sufragará con fondos del Impuesto de Turismo Sostenible (ITS). El Consell aportará el 25% y Sant Josep y Sant Antoni el otro 25%. Sant Josep aportará el 80% de esta cuarta parte (por el porcentaje de ocupación de su municipio) y Sant Antoni, el 20% restante.

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