Sant Antoni eliminará su empresa pública porque ya «no reporta beneficios»

El alcalde, Marcos Serra, justifica que el gerente, que es su cuñado, trabaje desde fuera de la isla pese a que, según el PSOE, su función es «presencial»

El complejo deportivo de Can Coix, en Sant Antoni, que gestiona la empresa Ossan. | VICENT MARÍ

El complejo deportivo de Can Coix, en Sant Antoni, que gestiona la empresa Ossan. | VICENT MARÍ / eugenio rodríguez. eivissa

El Ayuntamiento de Sant Antoni disolverá este año la empresa pública Obres i Serveis Sant Antoni (Ossan) porque, según el alcalde, Marcos Serra, ya no tiene sentido su mantenimiento: «No reporta los beneficios en la contratación de personal y servicios de antes». Serra indica que ahora, normativamente, el funcionamiento de las empresas públicas se ha equiparado a la de las instituciones. Además, en este caso, Ossan gestiona sólo el complejo deportivo de Can Coix y la piscina municipal, por lo que su gestión puede pasar a manos de la concejalía de Deportes.

El alcalde reveló en el último pleno la intención del equipo de gobierno de eliminar la empresa pública, en respuesta a una pregunta del PSOE sobre el hecho de que desde hace meses el gerente de Ossan, que es cuñado de Serra, vive fuera de la isla y teletrabaja cuando la ficha de su plaza en la Relación de Puestos de Trabajo establece que «su función es de carácter presencial en el complejo deportivo».

En su respuesta, el alcalde se limitó a explicar que el gerente comparte el trabajo presencial con el teletrabajo y que ahora está centrado en la tramitación de la disolución de Ossan.

En declaraciones a este diario, el alcalde indicó que todos los trabajadores que dependen del Ayuntamiento pueden teletrabajar «con la autorización de su superior».

En este caso, el alcalde, como presidente de Ossan, fue el que dio el visto bueno a que el gerente pudiera trabajar desde fuera de la isla. «No es el único. Varios técnicos combinan el trabajo presencial con el teletrabajo. Él es uno más», apuntó el alcalde, al tiempo que señaló que su parentesco familiar no supone ningún problema en dicha autorización.

«Es un tema menor, la cuestión es que salga el trabajo. Yo soy el presidente [de Ossan] y no puedo delegar. ¿Lo despido porque es mi cuñado? No hay ningún trato diferente con respecto al resto de trabajadores», justificó. También recordó que esta persona ocupa el cargo de gerente de Ossan desde «muchos antes» de que Serra entrara en el Ayuntamiento.

18 trabajadores

Así como los trabajadores de Ossan pasarán a depender laboralmente del Consistorio tras la disolución de la empresa pública, el gerente no. «No se integrará en el Ayuntamiento porque cuando se elimine la empresa pública, su función ya no tiene ningún sentido. El secretario, el interventor, el concejal o los técnicos ejercerán sus funciones», adelantó Serra.

La empresa pública dispone de 18 trabajadores, además del gerente, con un coste de algo más de medio millón de euros, según el presupuesto de Ossan de este año, que asciende a casi 1,2 millones. La mayor parte de los empleados, con un total de nueve, son monitores deportivos. A ellos se añaden un administrativo y dos auxiliares administrativos, tres oficiales de mantenimiento y tres personas de limpieza. El alcalde indica que algunos trabajadores son autónomos.

El Consistorio cada año tiene que hacer una transferencia de dinero a Ossan para cubrir el coste de la piscina, cuyo servicio es deficitario. Con ello, el Ayuntamiento evita un incremento considerable de las cuotas de los usuarios, según explica Serra.

Con la disolución de la empresa, el Ayuntamiento tiene que asumir el personal así como sus propiedades. Ossan es la titular de la sede nueva del Consistorio.

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