Santa Eulària prima el comercio sobre la conversión de locales en viviendas

El pleno del Ayuntamiento de Santa Eulària aprobó ayer en la última sesión plenaria del año la prohibición de convertir locales comerciales en viviendas en las calles más comerciales de los núcleos urbanos de Jesús, Puig d’en Valls y Santa Eulària. En el caso de Santa Gertrudis y Sant Carles, el decreto Ley 6/2023, de medidas urgentes en materia de vivienda del Govern balear, queda sin efecto.

Esta limitación, que contó con el rechazo del grupo socialista y la abstención de Unidas Podemos y Vox, responde a la aplicación del decreto de medidas urgentes en materia de vivienda.

El objetivo de delimitar la conversión de los locales es «mantener la actividad comercial en los núcleos, que es tan esencial como la vivienda», según explicó la concejala de Servicios Territoriales, Cristina Tur.

En cuanto al crecimiento en altura, el Ayuntamiento de Santa Eulària lo limita al máximo fijado en cada zona según figura en las Normas Subsidiarias.

En el caso de Santa Eulària, casi todas las zonas afectadas por la prohibición se encuentran incluidas dentro del rectángulo que conforman las calles Sant Josep, el Paseo Marítimo, la calle Joan Tur Tur y José Guasch Vich. Fuera de este ámbito quedarían la calle Sol, Camí de Missa o César Puget Riquer.

En el caso del núcleo de Jesús, la limitación incluye la vía principal que atraviesa el pueblo, la avenida de es Cap Martinet, y las calles Gavina y Faisà y se extiende hasta la urbanización que actualmente se está ejecutando porque los locales serán «futuros comercios para el núcleo de Jesús y es la zona céntrica de toda la parroquia», precisó Tur. Finalmente, en Puig d’en Valls queda prohibida la reconversión de los locales en las calles del Camí Vell de Sant Mateu, sa Tanqueta, Ciudad Jardín, Marí Mayans y Padre Bartolomé .

El portavoz socialista, Ramón Roca, descartó que este decreto solucione la problemática de vivienda en un municipio «que no sólo tiene el precio de suelo más alto de España sino que vamos encaminados a serlo más con las nuevas viviendas que espantan a todos inmuebles de hiperlujo». Roca aventuró que ante este panorama no se vislumbra «un futuro donde haya vivienda de protección oficial, a un precio asequible».

Por otro lado, el socialista recordó que, tras la negativa del equipo de gobierno de dejar sin cumplimiento el decreto con el fin de estudiar las medidas «de forma precisa», sí hubo un «compromiso» por parte de la misma concejala de crear una comisión «en la que aportar nuestro punto de vista» que no ha cumplido porque «no se ha producido», matizó.

Para Roca, el decreto de la vivienda no es una «solución real» y apuntó que creará «más problemas de infraviviendas».

Por último, el portavoz de los socialistas resaltó la «falta de un análisis» más detallado y «más serio» que ofrezca «garantías jurídicas», alegando que echaba de menos «un informe de impacto económico» que justifique dicha limitación, una premisa compartida también por la representante de Vox, Paula Salsoso, que se abstuvo.

El concejal de Unidas Podemos, Álvaro de la Fuente, por su parte, se abstuvo e indicó que el decreto será «ineficiente» desde el momento que llega desde el Govern balear «sin distinguir lo que es Palma de lo que es Santa Eulària». Aunque de la Fuente celebró la protección del comercio local -«los locales son para comercios y no para pisos pateras», dijo- señaló que el decreto se «queda muy corto». Para el podemita, la acción en materia de vivienda es «urgente» y recordó su solicitud, rechazada por el equipo de gobierno, de declarar el municipio como «zona tensionada».

En su réplica, la responsable de Servicios Territoriales cuestionó si, tras ocho años de gobiernos progresistas, se estaba mejor: «Yo creo que no y este es un decreto que, en todo caso, suma; no resta nada».

Tur alabó el hecho de que el decreto ley «respete» las competencias de otras administraciones y resaltó como «novedad» que «una administración superior [Govern balear] no interfiera en competencias municipales».

La limitación de la reconversión de locales comerciales en viviendas supone dar «la posibilidad a la gente de crear nueva vivienda», alegó la concejala. «Si tienes una parcelita puedes hacer una planta más para tu hijo y si tienes un local muerto de risa que no se alquila o no pagan el alquiler puedes hacer una vivienda para tu nieto», justificó. En relación a la aprobación de una moratoria, la concejala señaló que «sólo crean caos y especulación, que es lo que ha pasado durante muchos años en estas islas». En cuanto a la petición de informes, argumentó que el decreto da la «posibilidad y autonomía» de decidir en un plenario y «no requiere de ningún estudio».

Suscríbete para seguir leyendo