Condenado por amenazas y coacciones el empresario que gestiona fondeos ilegales en Porroig

Los denunciantes, de la plataforma Maltesa del Mar, esperan la sentencia por la denuncia del Seprona por delitos contra el medio ambiente

La jueza dice que la declaración del hijo del condenado, exculpándole, "no merece credibilidad"

Miembros de Maltesa del Mar, en Porroig.

Miembros de Maltesa del Mar, en Porroig. / Maltesa del Mar

Redacción

La magistrada-jueza del Juzgado de Instrucción número dos de Ibiza, María Paloma Povedal, ha condenado al empresario Evaristo Javier Soler Cardona, que en esta causa fue denunciado por un miembro de la plataforma Maltesa del Mar por los delitos de amenazas y coacciones ocurridos en mayo del año pasado en Porroig, en la costa de Sant Josep.

La magistrada ha decidido condenar al empresario, que explota ilegalmente fondeos en Porroig, por dos delitos leves de amenazas y coacciones, y le impone dos multas de dos meses con una cuota diario de seis euros, lo que suma 720 euros, así como al pago de las costas procesales.

Este hombre ya fue condenado por el mismo delito de amenazas contra la exconcejala de Medio Ambiente de Sant Josep, Mónica Fernández, por el inicio en 2021 de un expediente sancionador por la acumulación ilegal de residuos de todo tipo en un terreno de su propiedad en la carretera de Cala Tarida. “Sant Josep tiene muchos bosques y la maleza es un combustible excelente” o “te espero con la escopeta reforzada que tengo”, fueron dos de las amenazas que profirió contra la exconcejala.

Miembros de la plataforma bucean en Porroig.

Miembros de la plataforma bucean en Porroig. / Maltesa del Mar

Precisamente, Evaristo Soler fue detenido a mediados del pasado mes de febrero  por "obstaculizar" la retirada del primero de los tres barcos almacenados en la zona de servidumbre de la carretera situada junto a este solar de su propiedad. Por esta detención está acusado además de los delitos de "desobediencia grave a la autoridad y a sus agentes", añade el Consistorio.

Los hechos que ha declarado ahora probados la jueza tras denuncia de uno de los miembros de Maltesa del Mar (una plataforma sin ánimo de lucro que se dedica al cuidado de fondo marino) se remontan al 29 de mayo de 2022, "cuando el denunciante se encontraba buceando en apnea junto a otros compañeros" de esta asociación "en la zona conocida como Porroig, en Ibiza".

"Tengo seguro, así que te paso por encima, te mato y no pasa nada"

Entonces, recuerda el fallo, que ha sido adelantado por eldiario.es y al que ha tenido acceso este diario, "se aproximó el denunciado Evaristo Javier Soler, al que no conocía previamente, en una embarcación, aproximándose muy cerca de donde se encontraba el denunciante, instándole a que se fuera del lugar, diciéndole “no quiero volver a veros por aquí, tengo seguro, así que te paso por encima, te mato y no pasa nada". Ante esta situación, y "temiendo poder sufrir algún percance al estar la embarcación tan cerca, el denunciante y sus compañeros salieron del agua, siendo seguidos por el denunciado en aptitud agresiva increpándoles diciéndoles que no quería volver a verlos por allí, que Ibiza es muy pequeña y ya nos encontraremos, 'no sabéis quién soy yo, os vais a enterar', ante lo cual, el denunciado y sus compañeros optaron por irse, siendo perseguidos por el denunciado hasta el parking en la misma actitud, hasta que se marcharon", prosigue el fallo judicial.

La declaración del hijo del denunciado "no merece credibilidad"

La jueza destaca que dos testigos corroboraron la versión del denunciante, que además en sede judicial "se ratificó en la denuncia prestada en dependencias policiales y explicó minuciosa y exhaustivamente los hechos denunciados". También que no se aprecia, en el caso del denunciante, "ningún móvil espúreo o interés" puesto que "no parece que conociera perviamente al denunciado". Estas consideraciones se apuntalan, añade la sentencia, por la "[prueba] documental (vídeo aportado en la causa)".

El fallo analiza además la declaración del hijo del denunciado, como testigo, "no mereciéndonos credibilidad" porque además, "no ha aportado ninguna prueba, pudiendo hacerlo, siquiera fuera los billetes de avión o cualquier otra prueba que pudiera corroborar sus palabras de que su padre estaba con él en Barcelona, siendo que los denunciantes lo han identificado en el atestado como el autor de los hechos, y siendo que el denunciado no ha comparecido en el plenario, pese a estar citado en legal forma, colocándose así voluntariamente en una situación procesal que le impide dar una versión exculpatoria de los hechos, entendemos que se ha producido prueba de cargo suficiente para desvirtuar el principio de presunción de inocencia, y condenar al denunciado por un delito leve de amenazas y otro de coacciones".

El ahora condenado está también pendiente de una sentencia por una denuncia interpuesta por un presunto delito contra el medio ambiente a instancias de una investigación del Seprona de la Guardia Civil.