La Memoria del Consejo Económico y Social (CES) de Balears de 2020, organismo asesor del Govern que recopila datos sobre la economía, el trabajo y la sociedad de la Comunidad Autónoma, destaca que Formentera tiene la renta bruta disponible por habitante más baja de todas las islas, un 28 por ciento por debajo de la media española y un 30 por ciento de la balear, alrededor de 11.275,5 euros.
Este dato, que se repite año tras años en la citada Memoria del CES, «no es justificable», según reconoció el propio conseller insular de Economía y Hacienda, Bartomeu Escandell: «Tampoco lo entendemos, puede ser por la economía sumergida, por la presencia de actividades que tengan domicilios fiscales fuera de la isla y porque los mayores, los jubilados, reciben pensiones bajas».
El hecho es que recientemente la Estadística experimental del Instituto Nacional de Estadística (INE) de renta de los hogares que acaba del año 2019 situó a Formentera como el municipio de las Pitiusas de mayor renta bruta media por persona, concretamente 18.269 euros. Le seguían en ese registro Ibiza con 18.076 euros, Sant Josep con 17.577, Santa Eulària con 16.580, Sant Joan con 14.871 y Sant Antoni con 14.487 euros.
Un reciente estudio del INE situaba la renta bruta por persona en 18.269 euros, la más alta de las Pitiüses
Durante la presentación la presidenta del Consell, Ana Juan, destacó la labor del CES: «Un órgano independiente de participación y análisis que nos ayuda a tomar una fotografía real de la situación actual de las islas ya repensar nuestro futuro». Al acto de presentación también asistieronel presidente del CES, Rafel Ballester, el secretario, Josep Valero y la jefa de Estudios, Ana Garau.
Estacionalidad y presión
La presidenta del Consell, Ana Juan señaló que el informe de 2020 «incide en la grandísima estacionalidad de nuestra economía así como en la fuerte presión humana sobre Formentera en los meses de verano, con los datos porcentuales más altos de las islas».
Añadió que «son aspectos que deben hacernos reflexionar sobre el camino que hemos recorrido y el futuro que queremos para la isla».
Según explicaron desde el CES, la memoria de este año se caracteriza «por el impacto que ha provocado la covid-19 en Balears». Los datos más relevantes recogidos en la memoria en cuanto la situación económica indica que ha sido la comunidad más afectada del Estado. Esta conclusión se extrae del Valor Agregado Bruto (VAB) que retrocedió un 20,7%, el turismo cayó un 81% y el gasto turístico un 83,9%.
En las Pitiusas, la caída fue del 24,6%, la más fuerte de todo el archipiélago, debido a la dependencia del turismo internacional.
El peso del sector servicios en el total del VAB en las Pitiusas es el más elevado de las islas, del 71,1%; con un 83% de empresas de alta en la seguridad social en Formentera que operaron en el sector de servicios en 2020.
La población de Formentera está repartida según lugares de procedencia en este estudio. De esa forma en 2020 un 28,69% de población empadronada era extranjera y un 64,53% había nacido fuera de las Balears. Un dato, el de la población extranjera residente, que sigue siendo uno de los más altos de las Balears desde hace años.
