El Ayuntamiento de Sant Antoni aprobó ayer en un pleno extraordinario una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para tratar de mantener los suelos urbanos no consolidados de sa Talaia Norte, Bosc d’en Frit y Bahía de Sant Antoni. El decreto 9/2020 de medidas urgentes de protección del territorio establecía que el Consell, hasta el 31 de diciembre, o sea hoy, tenía margen para revisar los planeamientos urbanísticos y decidir libremente la clasificación de los terrenos afectados por el decreto: ya sea urbanizable, rústico o mantener su condición actual. Superado este plazo, la competencia pasa directamente al Govern balear, que tiene ahora de plazo hasta el 31 de diciembre de 2022 para tomar esta decisión.
El alcalde, Marcos Serra, explicó que el Consell no ha llegado a tiempo para tramitar esta revisión a través de una modificación puntual del Plan Territorial Insular (PTI) y, por ello, para tratar de evitar que ahora el Govern balear decida desclasificar estos tres ámbitos urbanos no consolidados del municipio, el pleno aprobó ayer, con la abstención de la oposición (votó en contra en el caso de la ASU de sa Talaia Norte), modificar el PGOU para mantenerlos en la situación actual, con una pequeña corrección en el caso de la ASU de la Bahía de Sant Antoni.
El concejal del grupo PSOE-Reinicia, Antonio Lorenzo, advirtió de que no tenía sentido aprobar ayer esta modificación puntual del PGOU porque el decreto 9/2020 indica que el Consell debía decidir sobre estos urbanos no consolidados antes de hoy.
De hecho, Lorenzo pidió al secretario de la Corporación que se pronunciara sobre ello. Este respondió que había revisado los tres expedientes desde el punto de vista formal, «no de fondo» en el sentido de «si tiene o no sentido esta modificación» del PGOU, aunque acto seguido indicó que el Ayuntamiento ha contado con el asesoramiento de «un arquitecto con mucha experiencia en estas cuestiones». «Ya veremos, en función de lo que nos digan otras administraciones [en este caso el Govern balear], si se va a poder seguir adelante. Yo entiendo que sí», dijo el secretario municipal.
El alcalde recordó que otros municipios en Mallorca han actuado igual que Sant Antoni. También aclaró que en el caso de la ASU de sa Talaia Norte (la oposición votó en contra de su mantenimiento como suelo urbano) «lo que se edificaría no es sa Talaia, que es zona verde, sino una parte situada al norte». «Esta ASU es la más pequeña de las tres», advirtió Serra.
El Consell solicita una prórroga para cumplir el decreto
El vicepresidente primero del Consell, Mariano Juan, explicó a este diario que no se ha llegado a tiempo para aprobar la propuesta de ordenación del Consistorio porque la documentación corregida entró en la institución insular hace un mes. Por ello, el Consell ha solicitado al Govern una prórroga para dar cumplimiento a lo previsto en el decreto. En todo caso, Juan recuerda que la ley de Urbanismo, de 2017, dio un plazo de un año a los ayuntamientos para hacer esta revisión urbanística y que, al no cumplirse, dictó este decreto. El vicepresidente apunta que «sigue en vigor» la potestad de los ayuntamientos para aprobar esta ordenación prevista en la ley de Urbanismo, por lo que entiende que es válido que se haga efectivo a través de una modificación puntual del PTI o la del PGOU aprobada ayer.
