La indignación de la oposición del PP en el Consell por la «nefasta» gestión del conseller insular de Cultura, Patrimonio y Deportes, David Ribas, aumenta por momentos y el presidente de esta formación, José Vicente Marí Bosó, exigió ayer al reponsable de la institución, Vicent Torres, que el lunes como muy tarde le destituya de sus cargos, o bien el PP propondrá al próximo pleno una reprobación pública de su actuación.

«El presidente Vicent Torres tiene hasta el lunes para cesar a David Ribas. Le nombró para que hiciera algo. Si no lo cesa, el PP propondrá la reprobación del conseller en el pleno», anunció Marí Bosó al finalizar la Jornada de Coodinación Insular que esta formación celebró para preparar el nuevo curso político.

Marí Bosó lamentó la ausencia de gestión del conseller, tanto en materia deportiva como cultural y patrimonial. De este último caso puso como ejemplo el progresivo deterioro de la torre des Llucs, en la que de momento el Consell sólo ha logrado que la propiedad la apuntale, pero continúa sin rehabilitar. Y,en Balàfia, la torre de Can Pere Musson «sigue derruida como el primer día». «Nuestro patrimonio está en la ruina más absoluta, sólo hace falta ver el caso de esa torre», señaló. Y, en materia deportiva, recordó las críticas por los retrasos en el pago de ayudas y subvenciones, entre otras cuestiones.

«Como es un conseller no electo, pues que cojan a alguien que sepa de qué va el tema», señaló el presidente insular del PP, quien añadió: «No sólo no sabe, sino que en cada pleno se permite, con toda la soberbia y prepotencia del mundo, dar lecciones a todos».

«Nuevo impulso para Ibiza»

Durante la jornada de ayer, a la que acudieron los principales cargos públicos de la formación, el PP ibicenco hizo un diagnóstico (obviamente negativo) de la gestión política de todas las instituciones que gobierna la izquierda y, como alternativa, propuso «un nuevo impulso para Ibiza», basado en una serie de propuestas encaminadas a potenciar la economía, las infraestructuras y los servicios públicos.

Marí Bosó indicó que «los servicios sociales han sido desmantelados, sin subvenciones ni concertaciones de plazas, y está por aprobar aún definitivamente la cartera de servicios». «Para remate, el hospital de Cas Serres ha sido entregado al Govern ante la negligencia de la consellera insular», añadió.

Además, en esta legislatura «no ha habido ni una sola infraestructura nueva en Educación», sino sólo «meros anuncios», indicó.

Del mismo modo, «no ha habido ni una sola Vivienda de Protección Oficial en cuatro años». «La retórica izquierdista ha impregnado la política de vivienda y, sin embargo, el resultado no puede ser más preocupante», pues «nada se sabe» del convenio para construir las VPO en el solar de la comisaría de Policía, ni de los siete millones de euros que anunció el Consell para comprar pisos, ni de otras iniciativas anunciadas pero no ejecutadas aún, apuntó Marí Bosó.

También fue crítico el PP con la situación de la sanidad. Ibiza «tiene las listas de espera más altas de la sanidad balear».

Otro de los aspectos negativos denunciados por el PP fue «la sumisión de Vicent Torres» a la presidenta del Govern, Francina Armengol, quien «ha birlado» a Ibiza «ocho millones de euros de fondos de financiación» y, además, ha cometido «el trile» de dar más dinero a Menorca con la ecotasa que a Ibiza.

Frente a toda esta situación, y ante «estos años negros de políticas equivocadas, parálisis, moratorias y prohibiciones», el PP de la isla de Ibiza propone «un nuevo impulso». Esta estrategia consistiría en «la planificación de la inversión pública en infraestructuras físicas en el periodo 2019-2023». Destacaría «un plan director para la consideración integral del ciclo del agua que permita la renovación de las redes de suministro y depuración».

Una nueva política turística «dotada de más recursos» para ordenación e inspeción y «una ordenación territorial razonable y consensuada» son otras de las propuestas que hace el PP para ese nuevo modelo.