La inversión en reformas de la planta hotelera de Ibiza supera los 43 millones

El total del gasto se justifica en mejoras y subidas de categoría de 33 establecimientos, en su mayor parte hoteles. La segunda inversión en importancia se está llevando a cabo en el Torre del Mar de es Viver, en Vila, con 7,9 millones, y la tercera, en el Acor Playa de Sant Antoni, donde un grupo inversor ha abierto un establecimiento de la línea hotelera del gigante Thomas Cook, bajo la marca Casa Cook. El coste se eleva a 5,2 millones de euros. En el Milord I y II se han gastado 4,5 millones.

También es importante el proyecto acometido en los apartamentos Paradise Beach, donde figura que han invertido otros 4,5 millones, y la reforma del Hotel Panorama y Marina de es Canar, con 3,2 millones. Al igual que el anterior, este establecimiento también ha sido adquirido por un fondo de inversiones, según confirman fuentes de la patronal.

La propiedad del Hotel Portmany también ha apostado fuerte este año por la mejora. Ha gastado un total de 2,5 millones de euros, según el listado facilitado por el Consell de Ibiza.

Obras de menor cuantía

El resto de las obras son de menor cuantía, aunque hay varias inversiones que superan el millón de euros, como las ejecutadas en los apartamentos Los Robles de Vila y en el Hard Rock Hotel de Platja d´en Bossa, con 1,7 millones.

El impacto en el empleo

Desde el Consell valoran este nivel de gasto destinado a la mejora de la planta hotelera. El presidente y responsable del departamento de Turismo, Vicent Torres, apunta: «Es un balance muy positivo el de 2017, con más de 43 millones de euros de inversión en reforma y mejora de la calidad de los establecimientos turísticos».

Entre otras consideraciones, Torres señala el impacto de estas obras en el tejido laboral ibicenco: «[Las inversiones en la mejora de la planta hotelera y de restauración] repercuten en forma de puestos de trabajo en el sector de la construcción durante los meses de invierno y sin que haya un consumo de territorio».

«Además», añade el presidente y responsable del turismo ibicenco, «todas estas reformas se han hecho sin que se haya producido un incremento de plazas, sino todo lo contrario: el número de plazas hoteleras ha disminuido gracias a los proyectos de reformas hoteleras, pasando de las 78.670 registradas en 2016, a las 77.688 del año 2017».

«El objetivo del Consell -añade al respecto- es seguir trabajando en la mejora de la calidad de la oferta de alojamiento, que redundará a su vez positivamente hacia un modelo turístico menos estacional y que busca un perfil de visitante más sostenible y de más calidad».

Optimismo de la patronal

Desde la patronal comparten buena parte de las impresiones de los responsables de la primera institución de la isla. Su presidente, Juanjo Cardona, considera que este invierno se han llevado a cabo «bastantes reformas», pero con respecto a los datos del Consell recuerda que están pendientes obras que vienen de años anteriores (como la del hotel en el solar del Cine Serra y la polémica de Cala Xarraca). Y matiza que la más importante de esta temporada, la del Piscis Park, no se ha llevado a cabo.

En cualquier caso, Riera considera que este nivel de inversión en el turismo ibicenco «demuestra que existe un gran interés por invertir en Ibiza por muchas razones, como la seguridad del destino, por la fuerza de la marca Ibiza y porque los intereses están muy bajos y se busca la máxima rentabilidad a las inversiones».

En cualquier caso, advierte de que este ímpetu en la reforma y la mejora de la planta hotelera no durará siempre. «El ritmo inversor bajará. Se han hechos muchas obras, muchas mejoras en los últimos años. Ahora está todo el mundo a la expectativa por lo que puede pasar estas temporadas» de verano, indicó.