Una nueva maniobra de Andrés Tuells prolongó ayer el inicio de los interrogatorios del proceso: el abogado, acusado además en la causa, solicitó (y la juez May El Youssef lo aceptó) que se leyeran todos los escritos de defensa, que en total ocupaban 42 folios. La lectura se realizó en voz tan baja, casi en susurros, por parte del secretario judicial, que apenas se oía. En la sala se escuchaba más el ruido de la gente que habla en el pasillo y el aire acondicionado que al secretario, que empezó a leer a las 10.30 horas y no concluyó hasta las 12.15 horas. Fueron 105 soporíferos minutos en los que incluso una persona relacionada con Tuells prefirió aprovechar el rato para leer el diario Sport. Otros asistentes se entretenían con periódicos o absortos en su teléfono móvil. Tras un receso de cinco minutos, el secretario judicial retomó la lectura con un poco más de ímpetu, pero tras 90 minutos, el cansancio causó mella en el funcionario, que apoyó su cabeza sobre la mano derecha.

La fiscal criticó esa lectura y recordó que se había tenido tiempo más que suficiente desde 2011 para saberse de memoria esos escritos. La situación, admitieron desde la acusación, era legal pero muy absurda.

La juez también aceptó que Tuells se sentara todo el tiempo en el estrado y con toga, por lo que Roque López permaneció solo en el banquillo.

Así Tuells sorteó ser retratado como acusado en un banco por debajo del nivel de los letrados. Ambos acusados ni siquiera se saludaron.

López, es más, confesó haber tenido una fuerte bronca con Tuells que derivó en su cambio de abogado.

En la sala estuvo presente el delegado del Colegio de Abogados en las Pitiusas, Juan Antonio Marí, ante el cariz que podía tomar un juicio en el que hay un duro enfrentamiento entre togados.

El Tribunal Superior investigó las denuncias de Tuells y López y consideró que no había base alguna para actuar contra Joaniquet y Espinosa, que se había presentado la querella sin la menor prueba e incluso con temeridad y mala fe, por lo que ordenó que se iniciaran acciones contra ellos por denuncia falsa.

Este juicio ya tuvo que ser suspendido en anteriores ocasiones porque Tuells denunció y recusó a la juez que tenía que presidir la vista oral, denuncia y recusación que también fueron desestimadas por el Tribunal Superior.